El Bloque Nacional de Seguridad Privada se declara en estado de alerta y movilización, y anuncia medidas hasta fin de año

El Bloque Nacional de Seguridad Privada se declara en estado de alerta y movilización, y anuncia medidas hasta fin de año

Es por la grave crisis que atraviesa la actividad y sus trabajadores quienes no logran superar el umbral de la pobreza.

Así mismo, señalaron como los grandes responsables de esta situación a las Cámaras Empresariales quienes, con una tesitura increíble, se niegan al menos a entregar un bono que ayude a paliar el déficit económico ocasionado por la escalada inflacionaria. No sólo eso, sino que también como vino denunciando el Bloque Nacional recientemente, ante la voluntad de los trabajadores de afiliarse al sindicato o postularse para delegados, son perseguidos y despedidos por las empresas de seguridad en clara violación a sus derechos y libertades garantizados por las Leyes y la Constitución. Por estas razones el gremio de vigiladores anunció que en los próximos días y hasta fin de año, llevará a cabo medidas en las empresas que prestan servicios en bancos, cadenas de supermercados, puertos, aeropuertos, logísticas, ferrocarriles, estadios de fútbol y hospitales, entre otros. 

Según trascendió, no sólo las empresas de seguridad serán pasibles de las inminentes medidas gremiales que plantea el espacio que lideran Christian López y Leónidas Requelme, sus clientes también debido a la precarización que someten a los vigiladores obligándolos a realizar tareas que no les corresponden, o contratando cooperativas como es el caso de lo que ocurre en el rubro supermercadista con las cadenas de Coto, Vital y Carrefour entre otras, esta última incluso dando cursos de adoctrinamiento a los vigiladores diciéndoles que deben "ponerse la camiseta" del supermercado, pero a la hora de pagar un bono se hacen los distraídos y se desentienden. 

Pero el problema en la actividad no sólo radica en la postura empresarial, también existen sectores políticos y judiciales que inexplicablemente deciden mirar hacia otro lado ante los reclamos por normalizar el gremio de la seguridad privada y siguen convalidando mediante la firma de paritarias y acuerdos en detrimento de los vigiladores, la conducción ilegítima de Ángel García, dirigente que no es elegido por los trabajadores desde el año 2012 y que esta investigado en varias causas junto a su mujer por fundir la obra social. 

En cuanto a la prestadora de salud, Lopez y Requelme coincidieron que "el Bloque Nacional ha demostrado este último tiempo la solvencia política necesaria como para empujar su normalización y que comience a dar salud a los trabajadores". En cuanto a la situación gremial, anunciaron que "seguimos trabajando y presionando para que en el 2023 al fin los trabajadores tengan una conducción digna que contemplen sus necesidades".

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