La canasta nos aplasta: movimientos sociales marcharon a la cámara de empresas alimenticias

La canasta nos aplasta: movimientos sociales marcharon a la cámara de empresas alimenticias

Este miércoles se realiza una jornada de lucha, con ollas populares en distintos puntos del país. Denuncian el aumento de los alimentos y los míseros salarios que cobran. Concentración frente a la COPAL.

Este miércoles a las 10 comenzó la movilización hacia la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL), como parte de una jornada nacional de lucha.

Entre los convocantes están el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), el MTD Aníbal Verón, FOB y otras corrientes.

En la convocatoria plantean que “ante el aumento inflacionario que impacta aún más, en los míseros salarios, que recibimos como trabajadores cooperativistas. ¡Exigimos salario para vivir y no para sobrevivir! Somos trabajadores y trabajadoras que llevamos adelante nuestras tareas todos los días, por un salario que apenas llega a los $10.293. Somos quienes garantizamos las tareas esenciales que ni siquiera son reconocidas. Quienes aseguramos un plato de comida para miles de familias en todo el país, quienes sostenemos comedores y copas de leche (que se han triplicado), quienes sostenemos postas de salud y cuidado desde el inicio de la pandemia, como también quienes acompañamos diariamente a mujeres y disidencias en situación de violencia machista y patriarcal. Sin embargo, nuestro salario es de indigencia”.

Denuncian que mientras que el Salario Mínimo Vital y Móvil se encuentra en los $21.600, la canasta básica familiar escala a los $54.207. Entonces, se preguntan: “¿Cómo podemos alimentar a nuestras familias con $10.293?”.

Criticaron el Consejo Nacional de Salario, que acordó una suba salarial del 28% mientras que la inflación en 2020 cerró superando el 36%, siendo los alimentos, los productos que mayor impacto inflacionario sufrieron.

Las acciones se realizaron en la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires, Santiago del Estero, Tucumán, Chaco, Neuquén, entre otras provincias.

Denuncian entonces la pérdida de poder adquisitivo de las y los trabajadores más precarios en la última época. “En 5 años, el salario mínimo ya lleva acumulado un 32% de perdida. ¡Y lxs trabajadores cooperativistas recibimos la mitad de ese salario por nuestras jornadas laborales! Nosotros, nosotras queremos aumento salarial, porque luchamos por un trabajo con todos los derechos. ¡Queremos una vida digna! ¡Queremos salario para vivir, no para sobrevivir!”.

 

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