Teniendo en cuenta esta nueva realidad, la Unión Jerárquicos Petroquímicos se declara en estado de alerta y asamblea permanente, en defensa de los puestos de trabajo.

Reafirmamos, como lo hemos hecho siempre, nuestra vocación de colaborar con la gestión de la compañía siempre y cuando no se tomen medidas que afecten una premisa fundacional de nuestro sindicato como es “la conservación del empleo”.

Nos permitimos recordar que cada vez que la empresa emprendió el camino de la confrontación sus resultados fueron penosos y duraderos para todos: trabajadores y empresa. 

Por último hacemos votos para que prime la razonabilidad y la búsqueda de soluciones inteligentes y superadoras, a la vez que reafirmamos nuestro compromiso ineludible con todos y cada uno de nuestros afiliados.