A raíz del cierre de la planta Fanazul, de Fabricaciones Militares, en la localidad bonaerense Azul, esta perderá alrededor de 9 millones de pesos en términos reales. Por eso, la situación no solo preocupa a los trabajadores despedidos, sino a la población en general que se ha solidarizado con esta grave crisis.
Luego del reciente cierre de la fábrica, los 230 trabajadores que quedaron en las calles continúan en estado de asamblea permanente. Desde el 2 de enero, vienen realizando diversas jornadas, con corte de ruta incluido, a la espera de respuestas por parte del interventor Jorge Riva.
El pasado 4 de enero se realizó una masiva movilización de aproximadamente 10 mil personas, algo inédito en la ciudad, lo que de alguna manera hizo tambalear a la dirigencia política y el Concejo Deliberante llamó a sesión extraordinaria el viernes 5 y decretó la emergencia laboral “por el término de un año”.
Por su parte, el intendente Hernán Bertellys, conformó un comité de crisis integrado por concejales y trabajadores que buscaran solucionar la situación de la fábrica. Este fin de semana, los trabajadores de Fanazul y vecinos solidarizados con su causa realizaron un acampe frente al edificio municipal.
Por el lado del gobierno nacional, las cosas parecen no querer cambiar, y es que el interventor, Riva reafirmó la decisión de reducir el déficit del organismo en un plan a tres años. Como se sabe, esas órdenes vienen directas del ministro de Defensa, Oscar Aguad, que hace mucho tiene la idea de privatizar Fabricaciones Militares.
Ante esta situación este lunes los trabajadores brindaron una conferencia de prensa para anunciar que este martes 9 de enero volverán a los cortes de ruta. Pero esta vez, redoblaran los esfuerzos y habrá tres cortes: en la Ruta Nacional 3 y 226 será total y en la Ruta 3 y 60 y Ruta 51 y 226, los cortes serán parcial.
En ese sentido, la Secretaria General de ATE, Vanina Zurita manifestó a NOVA que“estamos convocando al paro, porque entendemos que esto no es solamente el golpe a las 232 familias de fábrica sino que es un golpe a la clase trabajadora en su conjunto”.
Más adelante, Zurita remarcó que el cierre de FANAZUL “no solamente significa un golpe económico para la ciudad, sino también un golpe social, y así lo entendió la comunidad azuleña que ha dado por demás muestra de solidaridad hacia los fabriqueros”. Y añadió que van a “demostrarle al gobierno que no tan fácilmente pueden cerrarnos una fábrica y dejar a los compañeros en la calle”.
Los cortes en Azul estarán enmarcados en la jornada nacional de lucha de Fabricaciones Militares, donde los trabajadores estarán realizando diversas actividades, que se verán concretados en cortes de ruta, en las dos fábricas de Córdoba y en Sede Central.
La lucha de los trabajadores no cesa.
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