De esta manera, Bianchi sostuvo que “la temporada fue regular con picos altos los fines de semana. Y muy poca gente los días de semana”. En esta línea, recalcó que “Mar del Plata volvió al ciclo de fines de semana que llegan la mayor cantidad de turistas, cuando veníamos de temporadas completas. Las últimas dos temporadas fueron muy buenas, había gente todos los meses ininterrumpidamente. Ahora, volvimos a ver cómo la gente llega solo los fines de semana”.

Así, sobre las perspectivas del futuro del sector comercial, expresó: “hay que ver cómo evoluciona. Indudablemente estamos en un compás de espera postemporada. La temporada tuvo algunos vestigios de gente que ya tenía planificadas sus vacaciones y ahora estamos a la espera de cuáles van a ser los resultados postemporada en Mar del Plata. Hay que esperar, aunque las perspectivas no son las más favorables”.

Por eso, aseveró que “hay que analizar día por día. No hay una planificación de la economía a mediano o largo plazo a nuestro entender. Nuestra mirada es a muy corto plazo. Hay que esperar qué pasa postemporada para ver cómo queda el sector comercial, pero las perspectivas no son buenas. La secuencia de decisiones que toma el gobierno y que afectan a nuestro sector son semanales. Estamos a la expectativa de lo que ocurre semana a semana”.

En este contexto, Bianchi hizo hincapié en el reajuste salarial para el sector. “Los aumentos salariales siempre son importantes. Sobre todo, cuando Comercio está con una paritaria mensual”, manifestó. Asimismo, detalló que “a partir del mes de enero Comercio planteó que la paritaria del sector tiene que ser mensual debido a los altos índices de inflación. En enero y febrero tuvimos paritarias. Y ya hay una cláusula de revisión para el mes de marzo”.

Además, agregó que “las paritarias son importantes, que sean mensuales son importantes, los porcentajes son importantes. Lo que es complicado son los niveles de inflación de la economía argentina y la decidida acción del Gobierno Nacional en contra de la clase trabajadora”. De este modo, señaló que “el país que estamos viviendo ahora es de mucha tensión y de mucha descalificación de parte del gobierno para la gente que trabaja. Los trabajadores son los verdaderos depositarios del ajuste”.

“La gravedad de la situación y la falta de sentido común de las decisiones gubernamentales hace que tengamos que analizar a muy corto plazo porque los efectos sobre las mayorías de Argentina están siendo muy complejos”, concluyó.