El sector de transportistas que lleva a cabo desde el 16 de enero una medida de fuerza que impide la libre circulación de mercaderías e insumos en las rutas, sobre todo del sur del país, todavía no recibió una propuesta del Gobierno, aunque el lunes se cumplieron las 48 horas que les había solicitado Sergio Massa, presidente de la Cámara de Diputados de la Nación.

De esta manera, desde la Federación de Acopiadores de Granos calcularon que la medida de fuerza hasta el momento tuvo un costo para la Argentina de 100 millones de dólares. El número se origina por la imposibilidad de traslado de granos a los puertos, acopios, molinos y plantas de alimento balanceado. 

La Bolsa de Cereales de Bahía Blanca informó  que si se compara la última semana de operatoria normal del puerto con la que se vio afectada por el paro el número de camiones se redujo en un 94% aproximadamente y pasó de 6.313 a 388 vehículos, lo que representó 177.750 toneladas menos de exportaciones. 

Fernando Rivara, presidente de la Federación de Acopiadores, explicó a este diario que ese número de toneladas representan una pérdida de 76 millones de dólares de exportaciones. A esa cifra "hay que sumarle la pérdida en el mercado interno por los fletes que no pueden circular, y de los avícolas, de tambos y feedlots de la zona que no les llega el alimento", agregó. 

Sobre problemas de desabastecimiento, Daniel Funes de Rioja, presidente de la COPAL, detalló: "hay trastornos fuertes en la provisión de materias primas, como en la distribución de productos terminados derivados de los cortes, principalmente en plantas de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba, oportunamente lo denunciaremos al Gobierno". 

El encuentro que se realizó en el Congreso el último jueves fue junto a Santiago Carlucci, presidente de Transportes Unidos de Argentina (TUDA) y Carlos Daniel Geneiro, presidente de la Unión Nacional de Transportistas y Afines (Untra). La revisión de la tarifa por kilómetro fue el disparador de la mesa de diálogo, pero además se conversó sobre la creación de un cuadro tarifario que se apruebe por ley a través de una reforma de la Ley Nacional de Cargas (24.653) para evitar que los precios fluctúen según la oferta y demanda, y sigan un valor de referencia.

Según pudo saber El Cronista la estrategia del Gobierno es negociar por separado con los distintos segmentos que componen el mercado de transportes. Por esta razón, el Ministerio de Transporte -que no participó en el encuentro del Congreso- y sí se reunió la semana pasada con las cámaras de transporte de todo el país, se espera que anuncie "una nueva tarifa para el flete de los transportadores de granos", dijeron fuentes oficiales de la cartera que preside Mario Meoni. 

Carlucci, de TUDA, sobre este aumento dijo que se espera que sea del 20% y por los aumentos de la nafta "no nos parece que sea un paliativo" y amenazó con endurecer las limitaciones a la circulación en caso de no recibir una respuesta, pero explicó a El Cronista que esperarán al final de esta semana cuando podrían volver a tener otro encuentro en el Congreso con Massa. 

POR LARA LÓPEZ CALVO