La decisión del Ministerio de Defensa, que encabeza Jorge Taiana, de responder el requerimiento del Ministerio de Turismo y Deporte, para “socorrer” a la empresa low cost, Flybondi, afectada por el incremento de contagios de COVID-19 entre su personal, con la prestación para la operativa del Boing 737-700 de la Fuerza Aérea, a través de Líneas Aéreas del Estado, produjo malestar en los gremios aeronáuticos y en los Combatientes de Malvinas
El pasado 15 de enero, la cartera que lidera Matías Lammens, pidió la intervención a su par de Defensa la participación de LADE bajo el argumento de que “la presente temporada estival cuenta con altos niveles de demanda turística en nuestro país superando, en los principales destinos de cada provincia, el 90% de ocupación”.
Flybondi Limited, tiene matriz en Londres, por lo cual generó “asombro y malestar” entre los veteranos de guerra, sobre todo porque la aeronave que asistirá la operativa de la compañía aerocomercial fue bautizada “Islas Malvinas”, en homenaje a los héroes que lucharon contra los británicos por la soberanía Argentina en el Atlántico Sur. La decisión ministerial llegó en paralelo al lanzamiento “Agenda Malvinas 40 años”.
Por su parte, los sindicatos UPSA, APLA, APA y ATEPSA, exigieron “a los ministros de Turismo, Matías Lammens, y Defensa, Jorge Taiana, que se abstengan de avanzar en la aplicación de este convenio, por ser lesivo a la política aérea nacional en su conjunto y al interés de los trabajadores y trabajadoras aeronáuticos”.
Asimismo, expresaron a través de un comunicado que “en el momento en que es más violenta la campaña contra AEROLÍNEAS ARGENTINAS y su personal, por parte de los defensores del modelo neoliberal impulsado por el macrismo, aparece un convenio promovido por el Ministerio de Turismo y ejecutado por el Ministerio de Defensa para que LADE, empresa aérea estatal de fomento bajo jurisdicción de la Fuerza Aérea Argentina, opere un avión con personal militar para vuelos de la empresa low cost FLYBONDI”.
“La justificación esgrimida por Turismo fue “sostener la presente temporada estival”, ya que FLYBONDI había anunciado cambios y cancelaciones de vuelos por contagios masivos de Covid-19 de su personal de vuelo”, explicaron los gremios aeronáuticos.
Del mismo modo, agregaron que “es público y notorio que, a nivel mundial, la ola de contagios por la pandemia entre el personal de vuelo y de tierra de muchas líneas aéreas motivó miles de reprogramaciones y cancelaciones de vuelos. En nuestro país, las autoridades de AEROLÍNEAS ARGENTINAS y JETSMART han anunciado posibles cambios y reprogramaciones en algunos vuelos”.
En ese orden, señalaron: “Sugestivamente, el convenio firmado por el Ministerio de Defensa con FLYBONDI sólo parece reflejar preocupación por la operación de esta empresa. Precisamente, la empresa emblemática y favorita del período macrista de gobierno, durante el cual sostuvo su política de precios de dúmping sobre la base de la precarización laboral y la supresión de las bandas tarifarias que regulaban la oferta”.
Del mismo modo, puntualizaron que el dispositivo macrista promovió “la operación de un aeropuerto militar “low cost” (El Palomar) reciclado por el Estado Nacional, el desfinanciamiento público permanente de la aerolínea de bandera y la guerra declarada a los gremios aeronáuticos a través de la creación de un sindicato pro-empresa rápidamente aceptado por el Ministerio de Trabajo de ese período”.
“Sostenemos que es contraria a una política aérea al servicio del interés nacional que una línea aérea estatal de fomento como LADE sostenga a una empresa creada deliberadamente para convertir el transporte aéreo argentino en un negocio privado. Por otra parte, nadie garantiza que el personal militar del avión asignado a FLYBONDI no sufra los mismos contagios de Covid19 que el personal de vuelo de dicha compañía”, indicaron los sindicatos aeronáuticos.
Por último, solicitaron al Gobierno Nacional “coherencia en la defensa de nuestra aerolínea y nuestras empresas aeronáuticas de bandera y del trabajo aeronáutico argentino digno y altamente calificado. Las contradicciones internas y pujas de intereses sólo benefician a sus enemigos”.
Tal como denunciaron las organizaciones sindicales, Lammens le manifestó a Defensa que “resulta necesario reforzar los vuelos programados y, por lo tanto, se requiere la participación de Líneas Aéreas de Estado (LADE) para llevar adelante un conjunto de vuelos comprometidos por la compañía FB LÍNEAS AÉREAS S.A. (Flybondi), los cuales por motivos operativos corren el riesgo de no poder ser llevados a cabo, perjudicando a cientos de pasajeros en todo el país”.
La maniobra de ambas carteras sienta un antecedente peligroso en función de poner el dispositivo estatal en defensa de una compañía ajena a los intereses nacionales, sobre todo cuando la aerolínea de bandera es atacada por agentes políticos de la oposición, que cuando fueron gobierno, propiciaron el desembarco de la empresa low cost en la Argentina en nombre de una falsa “revolución de los aviones”.
Flybondi desembarcó en la Argentina en 2017, maneja el 38 % de los vuelos de cabotaje. La resolución oficial contradice el discurso de soberanía que Taiana proclamó con vehemencia en al cuestión que atañe a la vía navegable Paraná-Paraguay. Al mismo tiempo evidencia la caracterización de gestión de Lammens al frente del Ministerio de Turismo, donde resulta ser más importante la resolución económica que la política de soberanía nacional.
Comentá la nota