Recortes en ciencia: el salario de investigadores y becarios del CONICET cayó más que en la crisis del 2001

Recortes en ciencia: el salario de investigadores y becarios del CONICET cayó más que en la crisis del 2001

En los años de gobierno de Cambiemos, es desplome del poder adquisitivo alcanza el 37,6 por ciento, mientras que en la crisis llegó al 20 por ciento. El desplome alcanza a los trabajadores del sector científico. Además, el ajuste de fondos tiene números similares: 37,7 por ciento. En algunos organismos, el recorte de presupuesto llega al 70 por ciento.

Desde que llegó a la Casa Rosada, el presidente Mauricio Macri instaló un discurso de recorte del gasto público Con la excusa de achicar el déficit fiscal, la gestión de Cambiemos comenzó un proceso de achicamiento de la administración nacional, que tuvo algunas áreas especialmente golpeadas. Ya en 2016 el sector de ciencia y tecnología salió a la calle para alertar sobre el desfinanciamiento que se comenzaba a implementar en el sector, que se profundizó hasta la actualidad, donde los recortes superan largamente la media general. Además, esta situación repercutió en los salarios de investigadores y becarios, que durante estos años protagonizaron varias protestas contra esta realidad.

Esta semana, el centro de formación CIFRA de la CTA de los Trabajadores dio a conocer un informe donde analizó los datos de esta realidad, y afirmó que de 2015 a la fecha los investigadores perdieron casi un 40 por ciento de su poder adquisitivo. Esto lleva los salarios a niveles similares a los que tenían en la crisis del 2001. Para recuperar esta baja, este año se debería dar un aumento del 61 por ciento de suba de los honorarios.

Además, el trabajo denunció la baja de los fondos destinados al sector, que perdió el 37,7 por ciento de sus recursos en tres años, con picos que superan el 70 por ciento. Por esta situación, en muchos laboratorios peligran investigaciones de vanguardia, que están cerca de logran avances muy importantes para la ciencia argentina.

El informe del centro CIFRA buscó ponerle números a la caída del financiamiento del sector de ciencia y tecnología, y de la pérdida salarial de sus trabajadores, becarios e investigadores. “Visto en perspectiva histórica, el ajuste salarial impuesto por el gobierno de Macri generó un marcado retroceso en los ingresos de los investigadores y becarios”, sostuvo la entidad de la CTA de los Trabajadores.

Según el trabajo, “entre octubre de 2015 y diciembre de 2019 la pérdida de poder adquisitivo alcanzaría el 37,6 por ciento, es decir, los ingresos actuales equivalen a siete meses y medio de los registrados en 2015”. Esto hace que “para recuperar el poder de compra las becas y salarios deberían subir 61 por ciento”. “Se trata de un proceso sumamente intenso de caída del poder de compra, que es aun mayor al desatado en la crisis de 2001/2, en el que había caído alrededor del 20”, alertó el informe, al que tuvo acceso Gestión sindical.

CIFRA explicó que los salarios mayores a 40 mil pesos (las categorías superiores a “investigador asistente”), “tuvieron pérdidas aún más fuertes en el último semestre de 2018, ya que recibieron sumas fijas”.

La comparación con el momento de la peor crisis social de los últimos años, aquella que generó un éxodo brutal de científicos del país, no es azarosa. Según el informe, “en 2019 el poder de compra de la beca doctoral se situaría apenas 10 por ciento por encima del mismo nivel registrado en la crisis económica de 2002, lo que se trata de un retroceso de 16 años”.

Por su parte, el salario real del investigador principal, “tomado como testigo, se situaría por debajo del poder adquisitivo de 2006, con un retroceso de 14 años”. “Esto es así porque a diferencia de otros momentos con caída de poder de compra, la gestión de Cambiemos es la única que avaló cuatro años seguidos de recortes de salarios.

Comparando el promedio de 2019 con los 12 meses de 2015 la contracción acumulada alcanzaría el 31 por ciento”, remarcó el informe. Por el contrario, desde 2003 se había iniciado “un proceso de recuperación del poder de compra con mejoras de entre el 50 por ciento (becarios) y 100 por ciento (investigador principal) hasta 2012, año en que tuvieron un estancamiento con leve contracción hasta 2015, por la devaluación de 2014 que generó una caída importante del ingreso real”.

Esta realidad incluye a los trabajadores estatales que forman parte del sector científico tecnológico, que si bien son parte de la paritaria del Estado nacional, padecen los recortes y la baja de salarios. En este sentido, el informe de CIFRA hablo de “recortes significativos”, con valores similares a los experimentados por los becarios y los investigadores.

“Tomando los ingresos de octubre de 2015 y diciembre de 2019, la caída alcanzaría el 34,6 por ciento, por lo cual para recuperar el poder de compra de dicho mes deberían tener un incremento del 54 por ciento”, sostuvo la entidad de la CTA. “La pérdida se registró en todos los meses desde que asumió la Alianza Cambiemos, con excepción de seis meses de 2017, y para aquellas categorías que al momento de la paritaria tenían ingresos superiores a 40 mil pesos las pérdidas llegaron al 23,4 por ciento hasta diciembre de 2018”, agregó el trabajo.

“Tenemos compañeros cobrando 16 mil pesos, y la mayoría estamos por debajo de la línea de la pobreza”, se quejó Juan Manuel Sueiro, de ATE-CONICET. El dirigente analizó en diálogo con Gestión Sindical que “comprar dos leches diarias implica un gasto de 3 mil pesos, los salarios del sector quedaron muy atrasados”. “La pérdida del poder adquisitivo es destructiva”, remarcó.

En cuanto a los recortes de presupuesto, el trabajo de CIFRA analiza los ajustes constantes que desde el primer presupuesto nacional elaborado por el gobierno, en 2016, se fueron sucediendo en el sector de ciencia y tecnología, que incluyó la eliminación del Ministerio de Ciencia, y que motivaron varias marcas y protestas del la comunidad.

“Como parte del ajuste, y lejos de la propuesta de campaña de ‘duplicar la inversión en Ciencia y Técnica’, durante la gestión de Cambiemos, el financiamiento a del sector descendería 37,7 por ciento en términos reales, lo que implica un recorte de 28.421 millones de pesos en valores de 2019 actualizados por inflación”, sostuvo el trabajo.

El recorte en el presupuesto tiene impacto en todos los organismos del sistema, aunque en algunos la baja supera el 70 por ciento. En este sentido, entre 2015 y 2019, “las mayores caídas las registrarían la CONAE (70,4 por ciento), el ex Ministerio de Ciencia (57,5), el Instituto Nacional del Agua (46,4) y el INTI (45,1)”. En tanto, el CONICET tuvo un retroceso presupuestario del 27,7 por ciento entre 2015 y 2019. “Se trata de una reducción de 6.353 millones de pesos en valores constantes de 2019, y pese a ser la menor caída relativa, explica el 22 por ciento del recorte en la medida en que representa alrededor de un tercio del presupuesto general”, concluyó el análisis de CIFRA

Estos números hacen que muchos investigadores tengan serios problemas para seguir con sus investigaciones. Uno de los casos es el del equipo que lidera Jorge Montanari licenciado en Biotecnología e investigador del CONICET. En la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) viene trabajando en el desarrollo de nanosistemas para crear “medicamentos inteligentes”.

Su beca de tres años implicaba una serie de recursos para completar los ensayos en su laboratorio, pero desde hace un tiempo por el ajuste no están llegando los fondos. “La plata que a mí me deben del subsidio eran, en su momento, 11 mil dólares. Como no lo actualizan y lo van a pagar en pesos, la cifra va a ser mucho menor. Hoy son unos 2.100 dólares. Perdí cinco veces la capacidad de compra”, recordó en una entrevista. Este es un claro ejemplo de cómo además de perder salarios los investigadores sufren el ajuste.

Comentá la nota