Las medidas de fuerza se llevan adelante a pesar que desde la empresa ofrecieron una suba de los sueldos del 176%.

Franco Pela, quien actúa como delegado de los trabajadores, declaró: "Estamos exigiendo el reconocimiento de nuestros salarios iniciales, que ascienden a $508.000, una cifra que se nos adeuda desde hace un año. Actualmente, seguimos percibiendo solamente $184.000, y hemos mantenido nuestro reclamo de manera pacífica durante este período".

La compañía emitió una comunicación en la que alega haber propuesto una significativa recomposición salarial interanual del 176% al mes de septiembre para ambas plantas, tanto la ubicada en Llavallol (provincia de Buenos Aires) como la de Villa Mercedes. La empresa sostiene que este acuerdo fue consensuado a nivel nacional con el sindicato y posteriormente homologado por el Ministerio de Trabajo de la Nación, y que ya se ha implementado con éxito para los empleados de la empresa en Buenos Aires.

Sin embargo, hasta la fecha, este incremento no se ha materializado en la ciudad de Villa Mercedes, lo que ha exacerbado el descontento entre los trabajadores. Tanto es así, que llevaron a cabo bloqueos en puntos estratégicos de la ciudad, incluyendo la rotonda del Monumento al Indio, un acceso clave a La Ribera (sobre Ruta 2B) y la intersección de Avenida Jorge Newbery y Circunvalación.

La compañía Dánica, en su intento por mitigar la situación, subrayó su compromiso con la producción de alimentos destinados al mercado interno. Además, enfatizó que sus productos están diseñados con precios asequibles y están incluidos en la canasta básica de alimentos. En un comunicado, expresaron su intención de continuar haciendo todo lo posible para acompañar a sus empleados en la mejora de sus condiciones salariales y mantener un nivel de producción constante, con el objetivo de evitar problemas de abastecimiento en el mercado.