El secretario general de ATE, Ricardo Araujo, afirmó que se perdió una oportunidad de luchar por una mejora salarial sustancial con el acuerdo de la Utelpa en paritaria y sostuvo que ese arreglo “condiciona” las posibilidades de la lucha de la Intersindical. “Se aprovechan de algunas direcciones traidoras de los trabajadores”, dijo el gremialista.

El martes el secretario general de los Judiciales, Ceferino Riela, le había dicho a El Diario, anticipandose a la respuesta de los docetnes, que estaban “acostumbrados a pelear solos”. Con el acuerdo de los docentes firmado, sus compañeros de la Intersindical también se hicieron oir.

La Intersindical rechazó la oferta del gobierno del 28% en tres cuotas, al mes de agosto. Reclaman un 15% para el primer bimestre y seguir negociando la pauta anual. Sin embargo, la Utelpa se desmarcó de esa estrategia. Aceptó el 28%, a pesar de que también lo calificó de “insuficiente”, con la promesa de volver a renegociar salarios a partir de agosto.

Las desaveniencias entre la Intersindical y los docentes no son nuevas. En los últimos años han negociado salarios por separado y la conducción de Utelpa siempre acordó antes. El año pasado los gremios ya habían acusado de “traición” a la dirigencia de Utelpa, una política que tambien dio aire a agrupaciones opositoras en las propias filas de los trabajadores de la educación. El principal foco de conflicto salarial del gobierno ha sido con los trabajadores nucleados en la Intersindical.

“El 28% esta lejos de la realidad, el propio presupuesto provincial creció un 44,9%, la coparticipación un 44,6 y no se entiende por qué los sueldos crecen un 28”, dijo Arajjo este miércoles, en declaraciones a Emisora Pampeana. “Es número político con el cual creen que pueden conformar a los trabajadores, aprovechándose de algunas direcciones traidoras a los trabajadores, que aceptan este tipo de propuestas, pero no se puede aceptar para todo el año, una suma de este tipo”, insistió.

El gremialsita aceptó que el acuerdo de Utelpa “condiciona” el margen de maniobra de los otros grermios estatales porque “era un buen momento para plantar la lucha el no inicio de clases” “Si nos poníamos firmes en el no inicio de clases, teníamos una forma de condicionar al gobierno para negociar ahora una recomposición mejor. Al aceptar la propuesta nos deja en una situación de no tener un punto firme de reclamo. El no inicio de clases, era un punto firme de reclamo, para hacernos fuertes”, lamentó.

De todos modos, Araujo recordó que ATE dispuso un paro nacional el 2 de marzo y en La Pampa eso incluye las escuelas, por el reclamo de los monotributistas y los docentes que no aceptan la propuesta del 28%.