El cotitular de CGT insiste en que se otorgue un plus salarial «para las actividades que quedaron por debajo» de la suba de precios. El Gobierno ya rechazó la idea.
El cosecretario general de la CGT, Pablo Moyano, volvió a reclamarle al Gobierno nacional el pago de una suma fija a trabajadores privados de «las actividades que quedaron por debajo de la inflación». Y su pedido fue realizado luego de que el INDEC informara que el IPC de febrero fue del 6,6%.
Para justificar su exigencia, el líder camionero dijo que «como se le da un dólar soja o un dolar malbec a los vitivinícolas, también (el Gobierno) podría evaluar de dar la suma fija que están pidiendo muchas organizaciones gremiales».
Además, consideró que «sería importante para tener un aliciente más en el salario» y apuntó, sabiendo que desde el Gobierno rechazan la idea, que «se ve que no les darán los números».
En diálogo con FutuRock, también evaluó que ante la alta inflación «se van a tener que seguir reabriendo las paritarias, y cada organización gremial sabe hasta dónde puede pedir según la actividad».
Pablo Moyano, contra los empresarios
Luego expresó que el acuerdo de precios que llevó adelante el ministro de Economía, Sergio Massa, «lamentablemente los empresarios no lo están cumpliendo, remarcan permanentemente». Y consideró que tienen una notable «falta de solidaridad» en el contexto de la crisis económica y social que atraviesa el país.
Los precios al consumidor (#IPC) subieron 6,6% en febrero de 2023 respecto de enero y 102,5% interanual. Acumularon un alza de 13,1% en el primer bimestre https://t.co/nYndki01f9 pic.twitter.com/B98rPAl6dA
— INDEC Argentina (@INDECArgentina) March 14, 2023
«Nosotros colaboramos para el control de precios y para denunciar como los empresarios de alimentación encanutaban la mercadería, y nos mataron por todos los medios», recordó.
El reiterado reclamo de Pablo Moyano respecto a que se otorgue una suma fija por decreto cobra mayor relevancia luego de que ayer por la tarde el INDEC informara el dato de la inflación de febrero, que fue del 6,6%.
Se trata de un número que superó lo que habían estimado las consultoras privadas en la previa. Y así la variación interanual llegó a 102,5%, la más alta en 32 años.
La última vez que había llegado a esos niveles fue en octubre de 1991, durante el menemismo, cuando era ministro de Economía Domingo Cavallo y ya regía el plan de convertibilidad.
La inflación de febrero, en detalle
De acuerdo con lo informado este martes por el INDEC, la categoría que más aumentó en febrero fue la de alimentos y bebidas, que acumuló un incremento de 9,8%.
Se trata de prácticamente el triple del 3,2% que autorizó la Secretaria de Comercio para los productos que no están incluidos en los 2.000 productos congelados del programa Precios Justos.
En segundo lugar, el rubro comunicación aumentó 7,8%. Mientras que Restaurantes y hoteles completaron el podio con una suba de 7,5% registrada en medio de la temporada de verano y mucho movimiento turístico.
Bienes y servicios, por su parte, aumentaron 6,5%, en tanto que la categoría de Recreación y cultura subió 6,1%. Lo siguieron Salud, con 5,3%, y Bebidas alcohólicas, con 5,2%.
En contrapartida, el rubro que menos suba registró en el mes de febrero fue el de educación: 3,2%. Y Prendas y calzado de vestir, un 3,9%.
No obstante, estas ramas acusarán nuevos aumentos en marzo, al igual que las tarifas de agua y gas y el transporte, entre otros.
Hasta ahora, el IPC más alto de toda la gestión de Alberto Fernández fue el indicador del pasado mes de julio, cuando llegó a 7,4%, siendo la marca más alta desde abril de 2002, cuando alcanzó el 10,4%.
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