El gremio apuntó que desde la patronal instan a las empresas que representan que abonen un bono de fin de año de $2.000, con exclusión de las economías regionales, con cláusulas de absorción inaceptable e incompatible con los objetivos buscados con el pago del bono por el gremio.

Además, según informó la FTIA, los empresarios proponen que este pago se efectivice en "cómodas cuotas" hasta abril del 2017, en una demostración de "falta de voluntad política de los mismos integrantes de la representación empresaria que en otro ámbito suscribieron el acuerdo marco que fijó el bono de fin de año, y ahora resultan ser los mismos que le niegan a los trabajadores de este sector esta posibilidad".

"Ante ello la FTIA rechaza de plano la propuesta empresaria, por considerarla insuficiente y de mala fe. Más allá de lo insuficiente del monto y su pago en cómodas cuotas, los condicionamientos del pago la torna inaceptable ya que deja afuera del mismo a las economías regionales (frutihortícola, pequeña y medianas empresas arroceras), lo que representaría fraccionar el convenio colectivo de actividad, erigiendo trabajadores de primera y segunda categoría", argumentaron.

Tras extensas jornadas de negociación en el ministerio de Trabajo, el gremio denunció la "intransigencia y negativa" de la cámara empresaria y volvió a reclamar el pago de un bono de fin de año de $ 6.000