Los gremios docentes solicitaron apoyo de los concejales

Los gremios docentes solicitaron apoyo de los concejales

Dirigentes e integrantes de los tres gremios con representación en la ciudad, se presentaron ayer en el Honorable Concejo Deliberante, para entregar en la secretaría y en cada bloque, una nota en la que se les solicita a los ediles, “apoyo a la situación del conflicto docente que es de público conocimiento”.

En el texto, los docentes de FEB, SUTEBA y UDOCBA indican que la idea es que “los concejales puedan ayudar a poder generar aportes hacia la resolución de la mesa técnica salarial” convocada para hoy.

Fundamentan el pedido en “la difícil situación que atraviesa el colectivo docente ya que los sueldos actuales son de 9800 pesos por cargo” y que su intención “es superar la línea de pobreza que hoy se encuentra en 13.800 pesos”. La nota dirigida a los concejales está firmada por Luis Rodríguez, Rosana Sánchez y Leticia López, secretario y secretarias generales de UDOCBA, SUTEBA y FEB respectivamente. Los docentes fueron recibidos por las concejales Ana María Natiello y Graciela Di Pompo, del FpV/PJ (ver recuadro).

Luis Rodríguez puntualizó que fueron recibidos “con mucha amabilidad por las concejales del Frente para la Victoria/ Partido Justicialista y por el secretario del Concejo Deliberante y entregamos la nota a todos los bloques. Nuestra intención es que el piso salarial se eleve hasta superar la línea de pobreza, que es de 13.800 pesos”.

Al término del breve encuentro que los dirigentes sindicales mantuvieron con las concejales, Rodríguez, Sánchez y López dieron a conocer el motivo de la presentación que acababan de realizar, solicitando adhesión a la “lucha que se viene llevando a cabo, específicamente para la reunión técnica que se va a realizar mañana (hoy)”.

Actualmente, el conflicto atraviesa una instancia compleja, asumen los dirigente. “Es muy complicado, porque es posible que salga algo por decreto –señaló la dirigente de FEB-; es muy complicado conformar el salario y si van sumas en negro, estaríamos muy perjudicados los jubilados, que somos una masa grande de docentes. Queremos que todo salga bien, pero que salga correctamente, que no sea algo para perjudicar, sino para beneficiar al docente”.

El año pasado, el salario docente perdió un 10% de poder adquisitivo en virtud de los marcadores de la inflación en relación al aumento por paritarias de 2016. Según los gremios, ese desfasaje fue reconocido por el propio gobierno de María Eugenia Vidal, pero sin embargo no logran que se incorpore ese porcentaje al acuerdo del presente año.

¿Cómo ven la actualidad del conflicto? Al menos en esta ciudad, las últimas medidas de fuerza fueron acatadas por menos docentes y si bien la marcha federal docente fue multitudinaria, eso no se vé reflejado en los paros…

-Probablemente en el interior es así, pero en el conurbano la realidad es distinta, es muy difícil desactivar la medida de fuerza. En el primer cordón del conurbano (Avellaneda, José  C. Paz, Ezeiza), supera el 85% de adhesión. (L.R.)

-Acá es distinto porque el docente, además del temor que siente a que le descuenten del sueldo por los días de paro (por más que la Justicia rechace ese descuento), sucede que los padres están muy cerca del docente. Acá hay mucha intimidad con la familia y eso ejerce una presión sobre el docente y lo empuja a trabajar. (L.L.)

¿Qué mensaje que ustedes pueden darle a los padres al respecto?

-Nosotros queremos que, así como nosotros desde las escuelas estamos pendientes de los alumnos, de sus hijos, queremos que ellos en estos momentos también apoyen a los docentes. La educación parte desde la familia, pero nosotros diariamente atendemos hasta particularidades de sus hijos, cosas que les suceden a diario, por eso les pedimos solidaridad. Nosotros también tenemos a nuestros hijos en las escuelas públicas. Además, nuestro reclamo no es solo por salario, sino que también reclamamos por escuelas dignas, por servicio alimentario escolar. Si un nene viene sin zapatillas o con las zapatillas rotas, somos los primeros en reclamar y en golpear puertas para conseguirle unas nuevas. Estamos pendientes de eso, por eso un  poco nos duele la falta de reconocimiento a nuestra tarea, que no es sólo enseñar, sino estar pendientes de todo lo que tiene que ver con la educación. (R.S.)

-Creo que siempre, pero fundamentalmente en estas épocas, ahora se profundizado, el maestro es un poco el psicólogo, el que saca los piojitos, el que ata las zapatillas y el que muchas veces seca las lágrimas y trata de solucionar o de menguar las falencias que hay en algunos hogares. Hay hogares en crisis y el maestro es un puntal para eso. Por eso creo que los padres tendrían que considerar que estamos muy involucrados con la escuela. Ahora estoy jubilada, pero lo hice durante muchísimos años y lo sigo haciendo. Los chicos siempre necesitan un oído que los escuche, una voz que los acompañe y un sostén para su mal momento. No todo es tristeza tampoco, porque el docente también juega y se divierte con los chicos. El docente no es sólo el que enseña a sumar, a restar y a leer. El docente es más que eso. (L.L.)

-El mensaje a los padres, es solicitarles el apoyo en esta lucha. Nuestros sueldos se garantizan con los impuestos que cada ciudadano paga y en ese sentido, creo que tienen derecho a exigirle al Estado (nacional y provincial), que garantice la educación de todos los ciudadanos como lo prevé la Constitución Nacional.

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