“Casualmente” el día en que la CGT se reúne en Consejo Directivo, desde las 14 en Azopardo, el MASA (Movimiento de Acción Sindical), conducido entre otros por el taxista Omar Viviani y el ferroviarios Sergio Sasia, le pidió a la casa sindical central, la unidad del movimiento obrero. “Exhortamos a la conducción para dar los pasos que considere convenientes para lograr ese objetivo”, sostuvo un comunicado, en el que también golpeó al Gobierno por sus políticas.

“Luego de más de 2 años, la realidad nos marca que la situación se ha agravado en distintos aspectos, impactando al mundo del trabajo y a los sectores más vulnerables, sumado a la decisión del Gobierno Nacional de recurrir al Fondo Monetario Internacional, con todo lo que eso significa para nuestro país”, apunta el MASA al Ejecutivo Nacional. Luego, recordó que en 2016, cuando se decidió la conformación del triunvirato, ese mismo movimiento sindical marcaba su diferencia con la política y sostenía que “la devaluación monetaria, la fuerte remarcación de los productos de la canasta familiar, sin los controles correspondientes, los aumentos indiscriminados de los precios en servicios públicos y del transporte en general, con el agravante de una enorme cantidad de despidos tanto en el sector público como privado” significaban una fuerte “agresión constante” hacia “el poder adquisitivo del salario” y de los trabajadores en su conjunto. Con el panorama descripto, “el MASA exigía conocer el plan de Gobierno para vencer la inflación, reactivar el mercado interno, defender la industria nacional y el plan de infraestructura en obra pública y en transporte”.

Ahora bien, los acontecimientos fueron paulatinamente inclinando la balanza desde el distanciamiento con la CGT, a reunirse en el Confedera en el Teatro de La Fraternidad, y a marcar su clara intención de volver a las filas y lograr la ansiada unidad. Las exigencias del MASA pasan por armar un conjunto de ítems, los cuales Sasia llamó una “agenda programática” con propuestas de gobierno concretas y que el “movimiento obrero sea protagonista”.

Esta tarde, la CGT se reúne en Consejo Directivo y desde la mesa ampliada, van a intentar colocar en el Orden del Día, el proceso eleccionario que determine una nueva conducción en la central, aunque, vencidos los plazos legales para realizarse el Confederal el 22 de agosto, y no habiendo una idea certera sobre posibles nombres ni candidatos dentro del CD, muchos sostienen que lo mejor sería que el trinomio Schmid – Daer –Acuña finalice el mandato.