Tras seis meses de los primeros episodios de confrontación en el Sindicato Peones de Taxis (SPT), la Justicia allanó la casa del ex secretario general del gremio, Horacio Boix. El procedimiento, en el centro rosarino, estuvo a cargo del Organismo de Investigaciones (OI) bajo las órdenes del fiscal David Carizza.

En la causa se investiga el presunto enriquecimiento personal del dirigente con fondos del sindicato, pero no se libró orden de detención alguna.

Tras un accidente de tránsito a bordo de su Audi A7 Sportback, Boix quedó envuelto en un escándalo cuando sus propios ex compañeros lo denunciaron por presunta malversación de fondos del gremio.

Y a la suspensión por 45 días, se sumó la expulsión acompañada de una denuncia que recayó en manos de Carizza. El dinero de los afiliados, entre 250 mil y 300 mil pesos mensuales, habría sido absorbido a lo largo de todo 2019.

El hecho que disparó el malestar generalizado fue la destitución del tesorero de la entidad, Pedro Bustos, quien en abril mantuvo una fuerte discusión con Boix, y recibió como respuesta su apartamiento.

Y fue Carizza quien recibió la denuncia penal de Bustos. Días después, el referente judicial retiró junto a una escribana documentación del SPT. Luego, una auditoría externa ordenada por la actual conducción del sindicato determinó un faltante de 3.750.000 pesos.

La denuncia penal que presentó el tesorero Bustos contra Boix fue por defraudación, y aludió a una supuesta complicidad de terceros por desvío de fondos para "compras y servicios que en nada tienen que ver con el funcionamiento institucional". Entre ellos, figuran repuestos y reparación de autos de alta gama, gastos siderales en tarjetas de crédito o adquisición de materiales para la construcción.

El domicilio del histórico dirigente destituido, hombre de Omar Viviani en el territorio rosarino, había sido allanado por la causa que investiga seis balaceras contra las viviendas del actual titular Horacio Yannotti y otros directivos en varias oportunidades. De la investigación surgió la detención de Maximiliano "Cachete" Díaz, un hombre asociado a la banda criminal Los Monos.

El procedimiento de ayer obedece a la causa por la presunta malversación de fondos. En ese contexto, trascendió que no se libró la dentención de Boix, quien aún no fue citado por la Justicia a declarar.

"Esperaron seis meses para hacer un allanamiento, hemos presentado infinidad de pruebas y ofrecido personal del gremio para que declare. Ocurrieron las balaceras, y ordenan su allanamiento recién ahora después de 6 meses, resulta algo insólito, aunque confío en la Justicia. Hemos llevado pruebas, pero todo es demasiado lento. Boix dice que no tiene nada que ocultar, sin embargo pudimos probar el faltante de una suma millonaria", sostuvo sin medias tintas Yannotti.