Según las cámaras del sector, la patronal propondrá ajustarse a la pauta de aumento salarial del 18 por ciento que marcaron algunos gremios afines a la Casa Rosada.
El gobierno procurará que la discusión no se desmadre en reclamos que superen muy por encima la pauta diseñada en la Casa Rosada para este año, y por ello espera que se pueda acordar en un incremento del 20 por ciento.
El martes, luego del feriado del lunes, el secretario general del gremio, Sergio Palazzo, negociará con el presidente del Banco Nación, Juan Carlos Fábrega, en representación de ABAPRA.
A diferencia de otros años, el jefe de ADEBA, Jorge Brito, no participará en la mesa al incio, en una muestra más del distanciamiento del empresario del gobierno.
Desde el Ministerio de Trabajo se pretende que en el transcurso del primer cuatrimestre, los gremios más numerosos y cuya actividad tiene mayor impacto en la actividad cotidiana quede cerrado, para evitar conflictividad.
Mientras tanto se lleva a cabo la paritaria de los metalúrgicos, una actividad que sirve de referencia para el resto de las industrias.
En este caso, existe el condimiento de que el jefe de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Antonio Caló, se presentaba como un posible candidato a enfrentar al camionero Hugo Moyano en la conducción de la Confederación General del Trabajo (CGT).
De algún modo, los empresarios de ese sector consideran poco viable que se pueda cerrar un acuerdo en torno al 18 por ciento de techo sugerido por el gobierno.
Por otro lado, durante el primer cuatrimestre deberían cerrarse las paritarias del sector de la construcción, la de SMATA, que impacta en la producción de las automotrices, y las del sector público.
De ese modo, quedaría para el final la del sindicato de Camioneros, cuyos dirigente se muestran en abierta oposición al gobierno y van por un reclamo de incremento del 30 por ciento.
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