El super Ministerio de Economía que comanda Luis Caputo, y que parece tener bajo su tablero de juego al Ministerio de Capital Humano de Sandra Pettovello, apretó todavía más el torniquete que había colocado en torno a las paritarias.

La nueva orden que le llegó a Julio Cordero fue en abril no homologar paritarias que superen el 9%. Así lo reveló hoy La Nación. Es una vieja estrategia para atar las expectativas inflacionarias pero también parte del alineamiento de la realidad con el relato libertario de la baja de la inflación.

InfoGremiales había anticipado en febrero que Caputo ya tenía el control total de las negociaciones salariales. En un contexto en el que la negociación colectiva se maneja mes a mes, el funcionario quiere alinear las proyecciones de recomposición de haberes con su horizonte de reducción de inflación.

La nueva información desmiente las promesas del propio Cordero al asumir como secretario de Trabajo. Su desembarco se suponía que iba a normalizar el mapa paritario que tiene decenas de paritarias «pisadas».

“Se van a respetar los acuerdos entre privados”, le habría dicho Cordero a un empresario vinculado al transporte. Lo mismo le habría repetido a varios sindicalistas con quien tiene relación cordial. Hace una década que comparte con muchos dirigentes una semana una vez al año en Ginebra en la cumbre de la Organización Internacional del Trabajo, lugar al que asistía en representación de Techint y la Unión Industrial Argentina (UIA).

Vale el dato. La promesa de Cordero no podría activarse tampoco en términos operativos. Es que su gestión activó en la Dirección Nacional de Negociación Colectiva, el área que debe homologar las paritarias, el despido de 26 personas.