Este martes los delegados del gremio de ATEP (Asociación Tucumana de Educadores Provinciales) se reunieron para definir una postura de cara a la falta de diálogo con el gobierno provincial, y aunque no confirmaron ni descartaron medidas, aseguran que las negociaciones por el aumento salarial será lo que defina el comienzo del período lectivo.

Cabe recordar que a nivel nacional las negociaciones se encuentran en un momento clave para definir el arranque del próximo ciclo lectivo.  El último ofrecimiento  del Estado gira en torno a un incremento salarial que llevará el sueldo testigo desde el 1ro. de febrero a 7.800 pesos y desde el 1ro. de julio a 8.500, lo que implica un aumento que llega a 40% para los salarios mínimos.

En este sentido, el plenario de delegados del gremio de docentes tucumanos definió que a la hora de negociar el nuevo incremento docente para este año, se tendrán en cuenta el costo de los servicios; impuestos, gas, luz, agua, etc. “El acuerdo podría rondar entre 35 o el 40% para satisfacer las necesidades primordiales”, aseguran desde el gremio.

Si bien el inicio de clases está anunciado para el 1 de marzo, está condicionado por el cierre del nuevo incremento salarial, advirtieron.