Moyano destacó el papel central de la CGT en oposición a las políticas económicas del gobierno actual, señalando que el cambio comenzó el 24 de enero con un paro y una movilización masiva. Según el líder del gremio de Camioneros, estas acciones fueron respuestas a los pedidos de la población y un llamado a enfrentar las medidas impuestas por el gobierno.

“La inflación no cede, el DNU sigue vigente y hay millones de argentinos en recesión, enfrentando aumentos de tarifas, cierres de pymes y la pérdida de poder adquisitivo de los jubilados”, explicó Moyano sobre los problemas que enfrenta la clase trabajadora.

A pesar de una reunión de la dirección de la CGT con representantes del gobierno en Casa Rosada, Moyano decidió no asistir. “Primero le pedí disculpas a mis pares, pero es una cuestión de dignidad. No puedo sentarme a dialogar con personas como Franco o Posse, que se burlan cuando cierran empresas o despiden trabajadores”, manifestó.

No obstante, Moyano aseguró que la CGT, como institución, debe estar presente en las negociaciones, aunque él no puede colaborar con un gobierno que ejecuta políticas de hambre y represión contra una gran parte del pueblo argentino.

El secretario adjunto de la CGT también recordó su negativa a reunirse con representantes del gobierno, relacionada con una defensa que respaldó desde el 4 de marzo: “No puedo sentarme con personas que se ríen cuando cierran Télam”.

En la entrevista, Moyano cuestionó la veracidad de las encuestas que indican un creciente respaldo al presidente. “Uno camina por la calle, va al supermercado, y la ira de la gente aumenta. Por eso la conflictividad social también está en aumento, y las marchas del 23 de abril y el 1 de mayo continuarán por todo el país”, advirtió.

Finalmente, Moyano anticipó las próximas medidas de fuerza y destacó la importancia de demostrar unidad en las calles, junto a las dos CTA y los movimientos sociales. "Tenemos que ampliar la unidad y estar con todos los sectores del pueblo que están sufriendo. La movilización del 23 de abril y el 1 de mayo debe ser masiva para que el presidente entienda que hay otra Argentina que él no ve", concluyó.