El lunes 21 de noviembre puede ser -o no- un gran día para Mauricio Macri. Es que esa es la fecha que, según confirmaron a Clarín altas fuentes oficiales, trazó el Gobierno para avanzar con una respuesta concreta al pedido de los gremios y los movimientos sociales, para lograr así garantizar un fin de año tranquilo. La elección no es casual: será tres días después de la marcha que las organizaciones, con la adhesión de la CGT unificada, planean hacer al Congreso en reclamo de la ley para que se establezca por un año la emergencia social.

Inicialmente, la reunión con Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa, la CTEP, el Movimiento Evita y Trabajadores Excluidos iba a realizarse la próxima semana, con la expectativa de desinflar la movilización del viernes 18. Pero el avance del proyecto en el Senado no dejó margen para que las organizaciones dieran marcha atrás. Así, si bien enviaron un mensaje conciliador desde El Vaticano durante el encuentro que mantuvieron con el Papa, dejaron saber que la medida, más allá de la oferta que les hiciera la ministra de Desarrollo Social Carolina Stanley, igual se llevaría a cabo. 

En el Gobierno ayer no ocultaban su fastidio contra sectores de la oposición que movilizan el proyecto y hablaban de "oportunismo político". Incluso, según pudo saber este diario, fue uno de los temas que ocupó al Presidente y su mesa chica en la reunión de coordinación. "Los mismos que dicen que no va a haber problemas a fin de año ponen palos en la rueda", se quejaron. 

En Balcarce 50 entonces advirtieron que, estratégicamente, "no tenía sentido que quedara diluido el anuncio" para las organizaciones sociales. Y decidieron acoplarlo a la mesa de "Diálogo por la Producción y el Trabajo", la convocatoria en la que, por iniciativa del ministro de Trabajo Jorge Triaca, volverán a confluir gremios y empresarioscon el objeto de avanzar con el bono para el sector privado.

En la primera reunión, realizada el mes pasado en Casa Rosada, las partes arreglaron discutir un plus con un piso de $ 2 mil. El Gobierno, que espera con optimismo el encuentro, ya comenzó a convocar a gremios y empresarios para el 21 de noviembre. Aunque la cita con los movimientos sociales será en Desarrollo, Stanley también hizo lo propio.

Vale la aclaración: algunos organizaciones sociales tomaron con cierta preocupación la postergación, aunque desde el Gobierno se encargaron de bajarle el tono. "Nunca se había arreglado una fecha concreta. Pero,igual, lo importante es que el diálogo es permanente y alguna respuesta van a tener".

Tal como adelantó Clarín días atrás, la Casa Rosada cedió y aceptó ampliar el bono de $ 1.000 por grupo familiar para beneficiarios de la Asignación Universal (AUH). Aunque rechazó la demanda inicial de otorgar mil pesos por cada hijo, la oferta del Gobierno consistiría en adicionar una suma de $ 200 por cada uno. Igual la cifra aún no está cerrada: el jefe de Gabinete Marcos Peña y sus vicejefes, Gustavo Lopetegui y Mario Quintana, acordaron con Stanley terminar de pulir números con el ministro de Hacienda Alfonso Prat Gay la próxima semana.

En medio de tantas idas y vueltas, en el Gobierno todavía no definieron cuándo harán el anuncio del bono para estatales nacionales. Si bien estaba previsto que fuera la próxima semana, no descartan estirarlo unos días para que coincida con las otras dos reuniones. Pero eso dependerá de lo que pueda acordar el ministro de Modernización Andrés Ibarra con los líderes estatales Andrés Rodríguez (UPCN) y Hugo Godoy (ATE).