La metalúrgica, dedicada a reparación y mantenimiento de material ferroviario, argumentó una caída de trabajo para despedir a 100 trabajadores. La embotelladora de agua, en tanto, cerró su planta y dio vacaciones obligadas a sus empleados.
La situación económica y social en Chascomús entró en una etapa de preocupación, luego de los despidos ocurridos en la fábrica EMEPA y la suspensión de actividades en la planta de Villa del Sur.
Esta mañana, la empresa dedicada a la reparación y mantenimiento de material ferroviario echó a un centenar de trabajadores que desempeñaban tareas en diferentes áreas, argumentando una fuerte caída en el trabajo.
Mario Batista, Secretario de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), dijo a Notica Registrada que “la planta se va a reducir en un 50%, estamos en una asamblea permanente”, esperando nuevos despidos en los próximos días.
El dirigente gremial aseguró que “para salvar la empresa no queda otra determinación que hacer este movimiento (despidos). Estamos reunidos ente momento con responsables de la empresa”.
Por su parte, la fábrica de agua Villa del Sur (emplea a 200 trabajadores) decidió cerrar su planta y dar vacaciones a todos sus empleados, a raíz de -según comentaron- las abultadas sumas de dinero de las facturas de luz y con la intención de ahorrar energía.
De esta manera, los trabajadores tendrán una semana de vacaciones obligatorias durante los meses de junio y julio, estudiándose una medida similar en agosto.
De acuerdo a los empresarios, se analizará la cantidad de líneas de producción necesarias para satisfacer la demanda del producto y determinar la cantidad de empleados que serán despedidos cuando finalice el periodo de prueba.
Cabe recordar que Villa del Sur, del grupo Danone, ya había cerrado una de sus fábricas, ubicada en Berazategui.
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