Se trata de un organismo interno del Ministerio de Trabajo que definirá si el servicio es “esencial” para limitar las huelgas. Sus cuatro miembros fueron nombrados por Macri y Triaca.
El pedido de Metrovías para declarar “esencial” al servicio del subterráneo y restringir las huelgas de los metrodelegados será examinado por una comisión interna del Ministerio de Trabajo con profundos vínculos con el gobierno de Mauricio Macri.
La Comisión de Garantías está formada por cuatro integrantes titulares que asumieron a principios de mayo tras la publicación del Decreto N°387, firmado por el Presidente, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ministro de Trabajo, Jorge Triaca.
Los miembros titulares son Miguel Ángel de Virgilis, Alberto Tomassone, Juan José Etala y Miguel Oscar Berri. Según pudo saber Letra P, el pedido de Metrovías, acompañado sottovoce por el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, ingresa a la cartera que conduce Triaca y debe ser analizado por esta Comisión de Garantías para determinar la “esencialidad” o no del servicio.
Virgilis fue subsecretario de Trabajo durante la gestión de Macri en la Ciudad de Buenos Aires. Por ese entonces, trabajaba bajo las órdenes de Francisco Cabrera, ex ministro de Desarrollo Económico del distrito.
Tomassone es el histórico abogado del sindicato de Comercio que conduce hace años Armando Cavalieri, de muy buena relación con el gobierno de Cambiemos. El tercer integrante de la comisión “amarilla” es Etala, una abogado vinculado al PRO, con un paso por la Unión Industrial Argentina (UIA) y por la comisión directiva de Boca Juniors durante la primera gestión de Daniel “el Tano” Angelici, amigo y operador judicial de Macri.
Cierra el círculo de la comisión afín a Cambiemos Miguel Berri, flamante decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de La Plata y un histórico militante radical de la provincia de Buenos Aires. Además, actualmente ocupa el cargo de subsecretario de Ejecución de Créditos Fiscales y Tributarios de la Fiscalía de Estado bonaerense.
Ese cuerpo, de carácter independiente y creado por la Ley N°25.877 (ordenamiento del régimen laboral), entra en funciones “en el marco de un conflicto colectivo de trabajo” atravesado por medidas de fuerza.
La normativa es rigurosa en torno a qué servicios el Ministerio de Trabajo puede calificar de esenciales, pero abre la probabilidad de extender esa lista en caso de que la duración y extensión de la medida de fuerza ponga en riesgo “la vida, la salud o la seguridad de la población”.
En este caso, este grupo de funcionarios deberá definir si corresponde calificar como “esencial” al transporte en subterráneo, como solicitó formalmente Metrovías y desea, en la intimidad, el Gobierno de la Ciudad. Si prospera el reclamo de la operadora del subte, los metrodelegados deberían limitar las huelgas y abstenerse de impedir el funcionamiento convencional del servicio, que la empresa y la administración de Larreta buscarán cubrir con personal jerárquico.
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