Por: Juan Felipe Sacristán.

La Junta Directiva de Ecopetrol inició la negociación con tres sindicatos de la compañía, uno de ellos la USO, que presentó 101 peticiones con las que, aseguran, buscan convenir condiciones justas para los y las trabajadoras de la industria del petróleo. A raíz de la firma del acta de garantías han surgido versiones que indican que el costo de atender los reclamos ascendería a billones de pesos y pondrían en riesgo las finanzas de la petrolera.

El pliego de la USO tiene 20 peticiones nuevas, y 81 que hacen parte de negociaciones previas, algunas de las cuales están relacionadas con las posturas del nuevo gobierno. Por ejemplo, que la compañía se comprometa a operar con personal por contratación directa, privilegiando el talento nacional, tanto en la nómina convencional, y los contratos de concesión y asociación.

Solicitan que Ecopetrol se comprometa a no privatizar ni a Ecopetrol S.A. como a ninguna de sus filiales y que se recompren las acciones que fueron enajenadas. Además, asiento para los trabajadores en la Junta Directiva a partir de 2024 y que la USO pueda participar como sindicato en la ampliación del objeto social hacia otras energías.

Solicitan que el Gobierno y Ecopetrol busquen exceptuar a los pensionados de Ecopetrol de cualquier modificación al artículo 48 de la Constitución sobre seguridad social. Piden que el salario de los trabajadores y pensionados se incremente en igual proporción y se amplié a dos escaños para cada grupo en la Junta Directiva de los Patrimonios Autónomos.

“Para hacer posible el desarrollo integral de las personas que le prestan servicios personales, la jornada máxima de trabajo será de 38 horas a la semana, a la cual corresponderá una remuneración en la misma calidad y cantidad que la recibida hasta antes de la reducción”, es otra de las peticiones del sindicato.

Foto de archivo. Imagen de la refinería de Ecopetrol en Barrancabermeja, Colombia, 1 de marzo, 2017. REUTERS/Jaime Saldarriaga

Modificar la jornada de trabajo se deberán rediseñar las modalidades de los turnos teniendo en cuenta las complejidades geográficas, políticas y sociales. “En ningún caso los turnos de trabajo podrán exceder la jornada máxima de 38 horas semanales. La jornada que se pacte convencionalmente, en todos los casos seguirá originando sobreremuneración por trabajo nocturno, en dominical o festivo”, señala el pliego.

La USO también busca del pago de recargo dominical o de festivo de 200% sobre el salario básico y con derecho a día compensatorio. Así mismo, se establece el inicio de la jornada nocturna desde las 6:00 de la tarde con un recargo del 60% sobre la asignación diaria. Pide que se incremente en un 35% el subsidio de alimentación y en 20% el de transporte.

Solicitan que se cree un bono anual por las utilidades de Ecopetrol por cinco salarios por el salario de cada trabajador y uno semestral de alto riesgo de 4,6 millones de pesos. Así mismo, una prima compensatoria para los trabajadores de campos petroleros de 75.000 pesos diarios para contratistas o subcontratistas.

Las negociaciones del pliego empezaron el 10 de abril y tendrán 20 días iniciales para llegar a un acuerdo, prorrogables por otro periodo igual. Sin embargo, al conocerse el pliego, surgieron versiones, según la USO, por parte de altos directivos de la compañía de que el costo del pliego presentado “afectaría financieramente la empresa, la repartición de dividendos para los accionistas de Ecopetrol o el plan de inversión social del nuevo gobierno”, señalaron en un comunicado.

La USO calificó como irresponsables las afirmaciones y señalaron que son engañosas porque el costo laboral actual de Ecopetrol no supera el 2% del ingreso operacional de la empresa en los últimos 5 años. “No es cierto que los costos del pliego ponen en riesgo la estabilidad financiera de Ecopetrol. En el último proceso que nos permitió formalizar una Convención, el presidente Felipe Bayón en esa época reconoció que el costo total de la negociación (2018) fue de $180.000 millones de pesos; cuatro años atrás (2014) $150.000, es decir, sobredimensionan las cifras”, señaló el presidente de la USO, Cesar Loza.