En lo que fue el primer Congreso Nacional de Delegados de la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (Fatsa) en modalidad remota, Héctor Daer realizó una demostración de poder y mandó un mensaje a la interna cegetista, en ebullición por estos días.

Es que el titular de la seccional Buenos Aires del gremio logró reunir al presidente Alberto Fernández y los ministros de Trabajo y de Salud, Claudio Moroni y Ginés González García, respectivamente. Toda una exhibición de apoyo del oficialismo, espacio del cual es una de las principales espadas en el área sindical. 

"Este 55 Congreso Nacional de Delegados de la Fatsa, aunque haya sido por primera vez a la distancia, permitió continuar construyendo el futuro de la organización. Sanidad es el primer gremio que pudo formalizar un encuentro en el que participaron de forma virtual centenares de compañeros", afirmó Daer en un comunicado de prensa difundido posteriormente.

El también cotitular de la CGT reivindicó "los lazos solidarios" del gremio y sostuvo que esa condición permite atravesar todas "las inclemencias".

Por su parte West Ocampo resaltó esas presencias y aseguró que fue "una muy importante demostración de que el sector de la sanidad es central para el desarrollo de la sociedad argentina", porque enfrentar a la pandemia de coronavirus con "el apoyo del Estado significa proteger a cada trabajador como prioridad".

En su intervención, el Presidente agradeció "la importante labor de los trabajadores de la sanidad para que el país salga adelante", y reivindicó "su esfuerzo, el prestigio logrado y el enorme reconocimiento social" obtenido.

González García había señalado que "la pandemia evidenció la necesidad de que el sector de la salud se ubique en la primera línea de la política de Estado", en tanto su par de Trabajo, Claudio Moroni, remarcó "la profesionalidad de los trabajadores de la sanidad en todo el territorio nacional".