En pleno conflicto entre la CGT y el Gobierno nacional, parecía que iba a ver un respiro para el kirchnerismo. Luego de que Hugo Moyano había amenazado con un paro general debido a que las empresas no le otorgaban un bono de fin de año de 2500 pesos, un sindicalista había señalado que esto se había revertido.

Fue Julio Piumato, titular del gremio de los judiciales, el encargado de confirmar el logro obtenido por Moyano. Lo hizo a través de su cuenta de Twitter: "¡Felicitaciones a los camioneros que a pesar de diagnósticos agoreros obtuvieron el bono navideño de $2.500 en dos cuotas!".

El líder del gremio de los judiciales precisó que los 2.500 pesos serían abonados en dos cuotas, mientras que desde el sindicato de camioneros dijeron estar cerrando los últimos detalles para acordarlo en una reunión que aún no había concluido.

Sin embargo no todo es color de rosa y el director de Asuntos Laborales de FADEEAC, Lucio Zemborain, aseguró que "no hay ningún acuerdo firmado" para el otorgamiento de los 2.500 pesos.

En declaraciones a un medio porteño, Zemborain sostuvo que la entidad que integra le solicitó al gremio de los camioneros "diferir el tratamiento del bono para fines de enero y principios de febrero".

"Nosotros no firmamos nada", remarcó Zemborain y aclaró que las protestas que se estaban realizando empezaron a aflojarse un poco".

De esta manera, cuando aparecía que llegaba la calma entre sindicalistas, empresarios y Gobierno, todo indica que los ánimos se alterarán y por ahora nadie le garantiza al kirchnerismo que la CGT no lleve adelante un paro general.