El cónclave, que sesionó en la sede central de la FTIA ubicada en Estados Unidos 1474/76 de la Capital Federal analizó la situación social, económica y política del país y en especial la de los trabajadores y trabajadoras del sector y debatió sobre los distintos Convenios Colectivos de Trabajo de la actividad.

“Hemos hecho un análisis muy profundo sobre la situación política, económica y social del país. El Centro de Estudios Políticos de Argentina aportó datos muy enriquecedores sobre la realidad económica y financiera de nuestro país, nos permitió comprender y tener elementos para analizar la realidad con mayor detenimiento y precisión respecto a los números. Y allí surgió, claramente, lo que venimos sosteniendo: estamos en un país en crecimiento, con altísima inflación, con una productividad mayor de los sectores manufactureros y que esa productividad no se derrama hacia el conjunto de la sociedad, lo que genera pérdida de poder adquisitivo real por efectos de la inflación en los bolsillos de las trabajadoras y trabajadores. También analizamos lo altamente concentrada que esta la producción de alimentos, lo dominante que son en los mercados y la participación de estos sectores en la formación de precios”, indicó Morcillo en diálogo con Noticias Gremiales.com.

Añadió que: “Vemos que la actividad ha crecido, creció en cantidad de trabajadores, creció el volumen de producción, creció en productividad, mientras que ha disminuido el costo salarial sobre el producto terminado al igual que el poder adquisitivo de los salarios. Evidentemente la torta no se reparte como debería repartirse”.

En tal sentido, Morcillo completó sobre el tema: “Tras un análisis pormenorizado de los 9 convenios que firma nuestra Federación, con el aporte de todas las compañeras y compañeros, establecimos una estrategia para afrontar las revisiones que estamos teniendo de los distintos acuerdos paritarios, para lo que falta de este año y lo que viene en 2023, en cuanto a los pedidos salariales. Definimos pedir a todas las empresas un bono de fin de año y también reiniciar las negociaciones en el convenio colectivo más grande de nuestra actividad que es la producción y elaboración de alimentos”.

Obra Social

El Plenario también brindó un informe sobre el estado de situación de la Obra Social (OSPIA). “Buscamos –dijo el titular de la FTIA - que los secretarios y secretarias generales de todo el país tengan la información más precisa y más cercana de lo que pasa en la obra social. Por ello dimos un informe, extenso y completo, de la situación económica y financiera de la OSPIA, y el momento difícil que atraviesa debido a los altos costos de la salud, particularmente lo que son medicamentos de alto costo y de fuerte impacto. También explicamos las políticas de restricción que está habiendo por parte de la Superintendencia de Servicios de Salud que demora los pagos que nos tienen que realizar”, Agregó que “todo esto ha generado un amplio debate del que salieron algunas líneas de acción para resolver el déficit mensual que tiene la OSPIA y tratar de afrontar los próximos pagos que devienen de su normal funcionamiento. Los compañeros y compañeras han aprobado todo lo actuado y el plan de acción que hemos desarrollado para afrontar esta situación”.

El sindicalista recordó que “la obra social no una estructura administrativa independiente del sindicato. Pertenece a la signataria de convenio. En este caso quien elige su directorio es en la Federación, pero fundamentalmente es de todas las trabajadoras y trabajadores”.

Asimismo, junto a las sindicalistas mujeres integrantes de las comisiones directivas de los STIA se efectuó un análisis de la participación del gremio en la Campaña Nacional de información y difusión sobre el “Protocolo de actuación para el abordaje, la prevención, orientación y erradicación de la violencia y el acoso en el ámbito laboral”.