En una entrevista radial, advirtió que se trata de una iniciativa “mucho peor que la de Macri y que la de la dictadura” y llamó a los legisladores a no acompañar un avance que, según sostuvo, perjudica de forma estructural a los trabajadores y al sistema de seguridad social.

“El Presupuesto que se trata es de más ajuste para generar un equilibrio fiscal ficticio”, afirmó Moyano, y puso el foco en los artículos centrales del proyecto laboral. “Lo más grave es el artículo 75, el artículo 30 del proyecto, que fue denunciado ya desde el modo de votación de la ley”, señaló, al cuestionar que se haya optado por votar por títulos y no artículo por artículo para “esconder cambios de postura” de algunos bloques.

En ese sentido, denunció una fuerte contradicción del oficialismo. “Cuando el Gobierno vetó leyes como la de Financiamiento Universitario o la de jubilaciones dijo que no estaba justificada la fuente de financiamiento. Ahora, con la reforma laboral, establece exenciones tributarias, rebajas de aportes patronales y la creación de un fondo de asistencia laboral sin justificar de dónde salen los recursos. Esto va a perjudicar gravemente a la seguridad social”, remarcó.

Moyano adelantó que el tratamiento legislativo será clave para exponer responsabilidades. “Vamos a ver cómo votan los diputados, principalmente los que no pertenecen a La Libertad Avanza”, dijo, y fue categórico: “Nadie que se llame peronista puede apoyar una reforma laboral regresiva”.

Sobre el contenido de la iniciativa, sostuvo que “es uno de los proyectos laborales más regresivos de la historia” y advirtió que sus efectos no serán coyunturales. “Se están modificando cuestiones permanentes y estructurales de nuestro país, no solo en relación a los trabajadores registrados, sino a cuestiones estratégicas para todo el pueblo”, explicó.

También rechazó uno de los argumentos centrales del Gobierno. “La industria del juicio es un argumento falaz. El 70% de los juicios laborales son por accidentes de trabajo, no por indemnizaciones”, precisó, y alertó que “los jubilados van a subsidiar a los empleadores que pretendan despedir”.

Por último, Moyano llamó a la movilización social frente al avance del proyecto. “Es muy importante la manifestación en la calle”, subrayó, y acusó al Ejecutivo de “confundir a la gente con el término de ‘modernización laboral’”. “Para el Gobierno, los destructores del empleo son las leyes laborales, pero esta reforma es regresiva en lo absoluto”, concluyó.