Los choferes de colectivos de la provincia realizaron un paro por tiempo indeterminado tras no percibir la totalidad de los salarios de enero. La medida de fuerza comenzó el día viernes y la Subsecretaría de trabajo dictó la conciliación obligatoria que no fue acatada por el gremio. Por esta razón el gobernador Sergio Uñac manifestó que va “a ser implacable” y que aplicará “todas las sanciones correspondientes establecidas por la Subsecretaría de Trabajo". El gobierno provincial declaró ilegal la medida y amenazó con sancionar al gremio.

Impulsó una resolución con una multa del 50 % al 2.000 % del valor mensual del salario del Salario Mínimo, Vital y Móvil vigente por cada trabajador afectado y que alcanzaría los diez millones de pesos.

Finalmente el sábado por la noche se levantó el paro y este martes se realizó una audiencia de conciliación en la cual los empresarios transportistas abonaron 10 mil pesos de adelanto y reclamaron el aumento del subsidio nacional. Se pasó a cuarto intermedio hasta este miércoles.

Desde el gobierno no se informó aún si se hará efectiva la multa a la UTA pero la resolución actuó como presión a las medidas de fuerza de los choferes. Un verdadero ataque al derecho a huelga de la clase trabajadora.