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FERNANDO CIBEIRA

La reimplantación del impuesto a las Ganancias -denominado ahora a los Ingresos Personales- incluido en el capítulo fiscal que acompaña a la sanción de la ley Bases que ayer comenzó a discutirse en la Cámara de Diputados, generó la inmediata reacción de sindicatos con alto nivel de especialización y, por tanto, un promedio de ingresos también alto, que iniciaron medidas de protesta por lo que significará una poda directa a sus salarios. Hicieron punta los afiliados al sindicato de Aceitero, al que ayer se agregaron los nucleados en la Federación Marítima, en tanto que la Confederación de Transporte anunció un paro para el lunes que viene. 

A ellos podrían sumarse petroleros, bancarios y portuarios, todos afectados por la medida que había sido eliminada por el Congreso en septiembre pasado, incluyendo el voto del entonces diputado Javier Milei. Las protestas ocurren en la previa de la gran movilización convocada por la CGT por el Día de los Trabajadores y antesala al paro general del 9 de mayo, muestra de un clima social cada vez más espeo ante el brutal ajuste del gobierno de Javier Milei. 

Las federaciones de aceiteros arrancaron el fin de semana con la declaración de un paro por tiempo indeterminado en rechazo a la vuelta de Ganancias, pero también a la reforma laboral que el Gobierno introdujo a último momento en la ley Bases en acuerdo con la oposición dialoguista y a espaldas del bloque de Unión por la Patria. Estos gremios se caracterizaron en estos últimos años por su intensa actividad y por conseguir las mejores paritarias en épocas en las que a la mayoría de los trabajadores no les fue tan bien. "Nosotros los enfrentamos. Si ellos quieren beneficiar a los empresarios como lo vienen haciendo, los enfrentaremos y veremos hasta dónde llegamos", sostuvo el secretario general de la Federación de Aceiteros, Daniel Yofra, en diálogo con El Destape Radio.

La medida de fuerza comenzó a la medianoche, cuando paralizaron todas las plantas con trabajadores nucleados en el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros de Rosario (Soear). Pasado el mediodía, a la medida se sumaron los integrantes de la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines. Con la huelga, frenaron todas las plantas del complejo exportador aceitero de la región centro del país.

Otra protesta que apuntó contra el estratégico sector exportador -que debe aportar los dólares que tanto urgen a la Casa Rosada- fue la resuelta por los afiliados a ATE del Senasa que dispusieron, a partir de las 0 hora de ayer, un paro de 72 horas, lapso en el que paralizarán toda la operatoria relacionada con las exportaciones y controles sanitarios en todo el país. "Este paro seguramente acarreará pérdidas multimillonarias para nuestro país y el Gobierno es el único responsable. Si se aprueba la ley Bases, el Estado será destrozado", concluyó el secretario general de ATE, Rodolfo Aguiar. 

El paquete fiscal que el oficialismo negoció con la oposición dialoguista del PRO, la UCR y Hacemos incluye una modificación del impuesto a las Ganancias que volverá a comprender a los trabajadores de la cuarta categoría. Luego de idas y vueltas, el nuevo piso quedó en 1,8 millones para los trabajadores solteros y 2,2 millones para los casados con dos hijos. Se calcula que volverán a tributar entre 800 mil y un millón de asalariados, aproximadamente la misma cantidad comprendida cuando se eliminó el impuesto, allá por septiembre del año pasado. 

La actualización del mínimo no imponible será semestral -a pedido de la oposición este año se hará una trimestral en septiembre-, con lo que es esperar que en los próximos meses, paritarias mediante, nuevos trabajadores queden incluidos. En tanto, para empresarios y sectores acomodados habrá moratoria, blanqueo y baja de alícuotas para el caso de el impuesto a Bienes Personales.

Contra esta modificación de Ganancias, los gremios integrantes de la Federación Sindical, Marítima y Fluvial iniciaron a partir de las 18 de ayer un paro total de la actividad hasta las 12 de hoy, cuando marcharán al Congreso para expresar su rechazo al proyecto. En tanto, el secretario de la Confederación de Trabajadores del Transporte, Juan Carlos Schmid, anunció que el próximo lunes habrá un paro en el transporte aéreo, terrestre, portuario y marítimo contra la restitución de ganancias. "El martes 6 de mayo en horas de mañana y cerca del mediodía se interrumpirán las actividades en el transporte aéreo, terrestre, portuario y marítimo en rechazo al acuerdo fiscal que nuevamente sanciona el Impuesto a las Ganancias", adelantó.

Esta ebullición sindical se produce en las vísperas del Día del Trabajador, cuando la CGT convocó a una gran marcha bajo el lema "La Patria no se vende" que concluirá en el Monumento al Trabajo, en Paseo Colón al 800. Será el segundo paso del plan de lucha aprobado por la conducción cegetista, que arrancó con la participación de la histórica movilización universitaria de la semana pasada. "La reivindicación tendrá que ver no solamente con la conmemoración de esta fecha histórica sino también tendrá como agenda un documento del país que nosotros planteamos, en el que discutiremos cuestiones que se han desbaratado en este último tiempo", sostuvo el co secretario general, Héctor Daer.

El plan de lucha contra el ajuste del modelo libertario concluirá el próximo jueves 9 de mayo, con la convocatoria al segundo paro general contra el gobierno de Milei. Pese a las versiones acerca de una negociación bajo cuerda con el Ejecutivo acerca del alcance de la reforma laboral y el aumento del salario mínimo que debe resolverse en breve, en la CGT negaban que eso pusiera en duda la realización del paro. Más todavía con las protestas que comienzan a florecer por la vuelta de Ganancias, el impuesto cuya eliminación esta misma CGT celebró con una multitud frenta al Congreso apenas unos meses atrás.