El encuentro entre el líder de los trabajadores de seguridad y su par de la CGT viene a darse en un contexto sumamente crítico para los vigiladores privados, quienes están sufriendo una situación particular en cuanto a lo económico con sueldos por debajo de la línea de la pobreza, en lo laboral dónde el sector empresarial está incumpliendo con el convenio de trabajo y los incrementos de la última paritaria, en lo sindical ya que el único gremio existente con personería nacional atraviesa una situación de indefinición judicial y en lo sanitario debido a que su obra social esta intervenida desde ya hace más de un año y aún continua con deficiencias en las prestaciones tras el vaciamiento y desfalco millonario producido por Angel García y Celestina Ferrara, sus anteriores autoridades.

La meta de los dos referentes más importantes del Bloque, López y Requelme, es clara: la unidad de la actividad a través de un gremio fuerte como la única alternativa posible para dignificar a los trabajadores. Ese fue el “leitmotiv” de la reunión con Pablo Moyano, quien desde su rol como líder de la central obrera expreso su voluntad para generar los mecanismos necesarios para definir la situación de los trabajadores acompañando al Bloque Nacional ante la unificación de estos dos referentes que vienen trabajando por la unidad del movimiento obrero.