El triunvirato de la CGT no pasó por alto las declaraciones del jefe de Gabinete Marcos Peña, respecto de la “falta de razones objetivas para decretar un paro”. Carlos Acuña, uno de los secretarios generales de la central ironizó que “si lo escucharan todos los desocupados, que cada día son más, pensarían que es el jefe de los ministros de otro país”. El referente de los trabajadores de estaciones de servicio consideró que el Gobierno debe respetar, desde sus expresiones y su acción política, a quienes están sufriendo los efectos del plan económico de Cambiemos.

“La verdad es que están mintiendo, porque lo que sucede realmente es otra cosa y les pedimos que sean responsables ya que están conduciendo un país’, refrendó Acuña.

En tanto, Juan Carlos Schmid, que también integra la conducción cegetista también destacó la movilización del 7M . ‘No nos levantamos esta semana y resolvimos un marco de protestas. Esto ha sido el resultado de encuentros, debate y discusiones con el Poder Ejecutivo y también con sectores empresarios, que no nos llevaron a encontrar las coincidencias que evitara la confrontación’.

“Si lo escuchan los desocupados van a

pensar que es el jefe de ministros de otro país”

El también jefe de la CATT consideró que una medida de fuerza, es la última instancia que posee el sindicalismo para aplicar en determinadas situaciones. “Es una apreciación desafortunada por parte de la jefatura de Gabinete”, resumió Schmid.

Mientras que Héctor Daer consideró un error que la Casa Rosada limite su visión de las protestas a razones partidarias, y subrayó que si bien los sindicatos poseen su ideología, las prioridades sociales son claras.”Queremos que los albañiles que están sin trabajo construyan las viviendas que hacen falta para que las habiten los argentinos y no que haya una misión del gobierno a China para importar casas prefabricadas”.