Sin la pesada mochila de coordinar y conducir a la CGT, Antonio Caló, el jefe de la UOM, expresó que los metalúrgicos saldrán a pelear en las calles sus puestos de trabajo. La convocatoria a Plaza de Mayo del sindicato industrial refrendó el malestar del sector con el Gobierno. “Vamos a hacer la pelea gremial y la vamos a hacer en la calle y si es necesario, movilizaremos a todo el gremio en defensa de las fuentes laborales de quienes ensamblan notebooks y computadoras”.

El sector de la cibernética es uno de los flancos por donde ese universo de trabajadores ve riesgos concretos, que el mismo Caló había anticipado un año atrás, en la previa de las elecciones. Ahora, el efecto “container” que pronosticó llegó a estas tierras.

“Demostraremos cómo defiende la UOM a sus trabajadores”, expresó el secretario general que sin embargo dividió en un 50% para la gestión kirchnerista y otro 50% a Cambiemos la actualidad metalúrgica en cuanto a responsabilidades. Sobre el presente crítico aseguró que la importación de computadoras será ácido para el empleo: “esta decisión gubernamental generará la pérdida de más de 5.000 fuentes laborales directas y alrededor de otras 5.000 indirectas, según nuestros números y que coinciden con los que manejan los empresarios”.

Como anticipó BAE Negocios, la UOM marchó en la Plaza de Mayo con más de 200 delegados de todas las seccionales metalúrgicas que conforman el secretariado nacional, convocatoria que se repetirá el jeuves. “Hablamos con el ministro de Producción, Francisco Cabrera, planteándole el problema y ellos responden que hay una decisión tomada y no nos dan ninguna solución a la situación que le expusimos junto con los empresarios”, consideró el dirigente ratificando que el panorama es crítico sobre todo a la hora de expresarle a los trabajadores que pueden ser despedidos, previa suspensión.

El gremio tiene registrados 12.000

cesantes y casi el mismo número de suspendidos

Para datos duros, según su dirigencia la UOM a la fecha tiene registrados alrededor de 12.000 cesantes y casi el mismo número de suspendidos.

Emiliano Gallo, responsable de prensa del gremio, señaló que pese a las gestiones con funcionarios no aparece solución alguna. “Aducen que es una decisión tomada y no hay vuelta atrás”, acusó.

Gallo, quién además es secretario general de la seccional Vicente López de la UOM, rescató que “la intención de estas marchas de los jueves alrededor de la Plaza de Mayo tienen como objetivo concientizar a toda ciudadanía de los que está pasando en la industria metalúrgica”.

Previamente a la movilización a Plaza de Mayo, los delegados sindicales se concentraron desde las 10 en las puertas del secretariado nacional de la UOM, Alsina 477, con carteles con las siguientes leyendas: “Basta de importaciones; protejamos el trabajo argentino; defendamos la industria nacional”.

Respecto del 50 y 50 con el cual dividió las responsabilidades de la crisis Caló, vale recordar que alguna vez, durante la gestión kirchnerista había declarado -en tiempos de paritaria- que el dinero no le alcanzaba a los trabajadores.

La misma presidenta Cristina Fernández le hizo saber su disgusto por aquella refl exión, mal trago que no inmutó al jefe de la UOM, que por aquel entonces ocupada la jefatura de la CGT que se alineó con el modelo económico que trazó la era 2003- 2015.