El conflicto de sanidad llegó a su fin: firmo un 45% de aumento salarial en cuatro tramos

El gremio de Héctor Daer arribó a un acuerdo por la suma que exigía y que las empresas del sector señalaban que no podían afrontar por falta de financiamiento.

La Federación de Trabajadores de la Sanidad firmó esta noche en la sede del Ministerio de Trabajo un acuerdo salarial con las prestadoras privadas por el 45% de aumento, que se abonará en cuatro cuotas. El entendimiento implica una suba escalonada del 15% en julio; 15% en septiembre; 10% en noviembre, y 5% en febrero, mes en el que habrá una revisión, informó el sindicato que comandan Carlos West Ocampo y Héctor Daer.

De esta forma se destrabó un extenso conflicto con el gremio de enfermeras y camilleros, que requirió de dos conciliación obligatorias e incluyó paros y varias manifestaciones y asambleas en sanatorios y clínicas privadas.

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El acuerdo llegó en medio de la una nueva conciliación obligatoria que había dictado la cartera laboral por cinco días hábiles y en momentos en que el sindicato había decidido redoblar la presión y convocar a un paro nacional con movilización para el próximo miércoles 4 de agosto, justo cuando vencía la medida de la cartera laboral. La medida de fuerza ya quedó descartada con el acuerdo.

Desde hacía varias semanas se extendía el reclamo de Sanidad, que incluyó huelgas nacionales que afectaron clínicas, sanatorios, laboratorios, geriátricos y hospitales de comunidad privados en demanda de un aumento del 45 por ciento, la nueva pauta salarial que uqedó establecida por la fuerte inflación y por la cual firmaron otros gremios.

Por su parte, los empresarios durante ese tiempo insistieron en que no estaban en condiciones de dar un aumento salarial si antes no se actualizan los aranceles que definen los financiadores (obras sociales, prepagas y el PAMI). También pedían el incremento en las cuotas de la medicina privada, que debía avalar antes el Gobierno.

«Como empleadores de más de 320 mil personas en todo el país, asumimos nuestra responsabilidad de generar los recursos necesarios para pagar salarios y poder prestar servicio normalmente, pero esos recursos no los generamos libremente en el sistema de salud en el que interactuamos ya que no somos formadores de precios», había lanteado días atrás la Federación de Prestadores de Salud (FAPS) respecto del conflicto.

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