“La protesta de hoy en Chorrera viene a completar una semana de movilizaciones en todos los centros de trabajo, incluyendo la planta central, de Cervecería Nacional.

Estamos abiertos al diálogo y a buscar soluciones a las problemáticas que se han estado dando. Lamentablemente no hemos visto la misma disponibilidad por parte de la empresa”, dijo a La Rel, Jaime Acevedo, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria Cervecera de Panamá (Sticp).

Uno de los problemas más graves es el de la tercerización de puestos de trabajo, que en el último año ha ido consolidándose y ampliándose de manera sistemática.

El Sticp estima que la empresa tenga tercerizado entre un 25 y 30 por ciento del volumen de entrega de productos, que podría representar alrededor de unos 200 puestos de trabajo.

Además, la tercerización afecta principalmente los volúmenes más significativos de carga, afectando de esta manera el salario de los trabajadores permanentes.

“Cervecería Nacional sigue tercerizando y se escuda en la crisis originada por la pandemia. Lo que hace es contratar a una empresa para que distribuyan los productos, aunque la situación no lo amerite ya que nuestra capacidad instalada es suficiente para suplir la demanda actual.

Esto no sólo violenta nuestro convenio, que prevé el uso de terceros sólo por algo esporádico y fortuito, sino que contribuye a precarizar cada vez más el trabajo”, apuntó Acevedo.

El secretario general del Sticp agregó que, de no observar cambios en la actitud de la transnacional cervecera, el sindicato se verá obligado a subir el tono de la protesta.

“Estamos en esta lucha porque es justa. Si la empresa no acepta resolver el conflicto por la vía del diálogo nos veremos obligados a continuar con las movilizaciones y a ejercer nuestro derecho legítimo a la huelga”, concluyó.