Los Moyano , Hugo y Pablo, fueron de las pocas voces sindicales que rechazaron públicamente el pacto para avanzar con recortes salariales de hasta un 25 por ciento que sellaron hace dos meses la CGT y la Unión Industrial Argentina (UIA), y que fue incluso avalado por el Gobierno.

Sin embargo, en su rol de empleadores, el número uno y dos del gremio de los camioneros exhiben fisuras en su discurso. En el Club Atlético Independiente, donde mandan desde 2014, avanzan a ritmo de machete en una rebaja salarial de entre 25 y 50% en el plantel profesional de fútbol, mientras que los salarios del personal raso del club se abonaron por primera vez de manera escalonada. Casi una ironía -o una gambeta- del destino.

La escasez de confianza acorrala, una vez más, al kirchnerismo

Es cierto que los salarios de los futbolistas profesionales que se desempeñan en los equipos grandes de la primera división son a veces obscenos. Suelen ser sueldos de por los menos seis cifras y en ocasiones con cláusulas a pagar en dólares. La paralización de la industria del fútbol por el avance del coronavirus empujó a los clubes a revisar sus números y a un ajuste inevitable en sus planteles. Es lo que sucedió en Independiente, presidido por los Moyano.

Fue el manager Jorge Burruchaga la voz y el rostro del achique presupuestario que se viene en el plantel de Independiente. Con el resto de los empleados del club, que serían unos 500, no hubo rebajas a pesar de que están enrolados en la Unión de Trabajadores de Entidades Civiles y Deportivas (Utedyc), un gremio que suscribió al convenio entre la CGT y la UIA para suspender personal a cambio del 75% del sueldo.

Con el personal raso hubo apenas una demora para completar el pago mensual. Recién anteayer se efectivizó la cuarta parte faltante del haber de mayo, según fuentes del club consultadas por LA NACION. En los próximos días deberían percibir el sueldo de junio y el medio aguinaldo, que hasta ayer no se sabía si iba a concretarse en cuotas o en un solo pago. 

La paritaria de los camioneros

En paralelo a la negociación en Independiente, los Moyano abrieron hace una semana la paritaria de los camioneros, que serviría de referencia para otros rubros. Con el argumento de que los camioneros son trabajadores esenciales y que abastecen al país confinado, en el gremio dicen que buscarán un aumento que no los deje en desventaja con respecto a la inflación.

"Al ser una tarea esencial, los trabajadores camioneros estamos garantizando el abastecimiento en todos los rincones del país. Por eso, más allá de la crisis económica, los empresarios tienen que hacer un esfuerzo, reconocer la tarea esencial, y nos pondremos a discutir en los próximos días un pago a cuenta, un porcentaje o un bono para que los compañeros tengan ese reconocimiento", dijo Pablo Moyano en una entrevista concedida a Infocamioneros, sitio web del sindicato.

Los empresarios, en tanto, tomaron nota del antecedente en Independiente. "Es una señal de que los Moyano interpretan el momento del país", dijo a LA NACION un jerárquico de las tres cámaras que negocian con el sindicato de los camioneros. Aseguran los empresarios que hubo caídas en la producción de entre 50% y 80% en todas las ramas, desde el transporte de alimentos y bebidas hasta el de combustibles y caudales, lo que, según ellos, imposibilitaría otorgar un aumento. Para las cámaras es ya hoy un logro no haber suspendido al personal.

El futuro de OCA

Vinculado a los Moyano, pero también al gremio camionero y a Independiente, porque a fin de cuentas, todo tiene que ver con todo, la ansiedad por resolver el destino de la empresa OCA ingresó en un inevitable compás de espera.

El Juzgado Civil y Comercial N°10 de Lomas de Zamora dispuso una subasta, entre el 28 de septiembre y el 2 de octubre próximos, para definir quién se quedaría con la empresa postal privada más grande del país, valuada por la AFIP y la Justicia en más de 30 millones de dólares. Trabajan allí 6076 personas, de las cuales 5800 están afiliadas a Camioneros. 

Quebrada, OCA es coadministrada desde hace un año por el Estado y el sindicato. Gonzalo Campici, un empresario del seguro cuyo grupo es sponsor de Independiente, fue el único interesado en comprar la firma postal. Campici sueña con hacer de OCA el gigante de la logística, que preste servicios para Mercado Libre, Amazon y Alibaba. Campici afirma tener un proyecto y dice que lo conversó con Moyano. El primer acercamiento habría sido hace dos años, en el palco 21 del estadio Libertadores de América, donde no solo se hablaría de fútbol.