La FeMPINRA aseguró que el atentado a Roberto Coria, “no es un caso aislado, es un intento de acallar la voz de los trabajadores en un sector estratégico para la economía del país”

La FeMPINRA aseguró que el atentado a Roberto Coria, “no es un caso aislado, es un intento de acallar la voz de los trabajadores en un sector estratégico para la economía del país”

La Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval de la República Argentina, que lidera Juan Carlos Schmid,  exigió a las a autoridades judiciales y de seguridad, tanto nacionales como de la provincia de Buenos Aires,  el inmediato esclarecimiento del atentado que sufriera, hace tres meses, Roberto Coria, Secretario General del Sindicato de Guincheros, Maquinistas y Grúas Móviles y miembro del Consejo Directivo de la FeMPINRA.

El 25 de noviembre de 2021, el dirigente sindical, fue víctima de un intento de asesinato en la puerta de su casa, en la localidad de Lanús. A tres meses del hecho, la justicia no avanzó en la investigación por lo que se desconoce la identidad y el paradero de los autores materiales e intelectuales del atentado. A pesar de ocurrido, dos días del intento de homicidio, Coria fue ratificado por los trabajadores, de manera contundente, en la conducción del Sindicato de Guincheros.

En este contexto, el Consejo Directivo de la FeMPINRA, denunció que “desde la vuelta a la democracia que los trabajadores portuarios, marítimos y navales no vivimos semejante violencia. Creemos en la Justicia, pero es imperioso que se trabaje para dar con los responsables materiales e ideológicos del intento del que el compañero Roberto Coria salvó, milagrosamente su vida”.

“No vamos a descansar hasta dar con los culpables que tienen manchadas sus manos de sangre. También exigimos a las autoridades competentes en materia de seguridad provincial y nacional que investiguen hasta las últimas consecuencias”, afirmó la conducción de la Federación.

En este marco, por último, los dirigentes sindicales que integran el Consejo Directivo de la FeMPINRA, subrayó: “No es un caso aislado, es un intento de acallar la voz de los trabajadores en un sector estratégico para la economía del país”.

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