La UOM que lidera Antonio Caló, las cámaras empresarias del sector y el Gobierno a través del ministerio de Trabajo, desarrollaron en la tarde y noche de la víspera un nuevo encuentro paritario, donde los representantes de cada área patronal y la organización sindical acercaron sus posturas. "Más cerca, pero todavía sin cierre", deslizaron de manera escueta fuentes sindicales que consultó BAE Negocios.

La pretensión de la UOM es llevar el inicial a $17.500 para el salario inicial, en tanto que el resto de las categorías deberían, a través del incremento, poder contener en sus ingresos el valor de la canasta familiar. A la hora de establecer el talle de la hora/labor Caló había resaltado que ningún trabajador de su organización podía percibir por ella menos de lo que cuesta un kilo de pan.

El sector industrial que cobija la UOM integra el bloque industrial que más ha sufrido la corrosión y la merma de consumo, con el dato duro de que desde fines de 2015 a la fecha se perdieron más de 30.000 empleos.

Decretado un paro que tuvo que haberse hecho efectivo el pasado 3, ante lo cual Trabajo dictó por 15 días la conciliación obligatoria, las partes continuaron las negociaciones. Incluso en la sede de Alsina y Bolivar, donde la UOM delibera a través de su secretariado nacional, los representantes que comanda el ex jefe de la CGT a partir de 2012, evaluaron cada detalle de la áspera negociación.

Este año la discusión salarial de los metalúrgicos volvió a ser referencial bajo la gestión de Cambiemos, la tercera desde que Jorge Triaca se encuentra al frente de la cartera laboral. A diferencia de otras discusiones, las rondas y valores porcentuales no constituyeron referencia en la graduación porcentual de años anteriores, cuando significaba una suerte de orientación para otras organizaciones sindicales, sino que cristalizan un monitor respecto a las dificultades que deben sortear los jefes gremiales para por un lado "perder por poco" frente a la suba de precios, como también a fin de superar la vara del 15% que el Gobierno. Rango que tuvo sólo algunas excepciones como Aceiteros, Utedyc, Bancarios y Aeronavegantes. Más allá de que según se vislumbra, por antecedentes, Camioneros podrá también subir a la terraza su valor, ya que ya abrochó un bono de $9.500 con los empresarios de ese sector.

Se recuerda que en cuanto a los números a los que arribó en su último informe el Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET), que conforman sindicatos de la CGT Azopardo y las CTA, la pérdida de poder adquisitivo dentro del lapso de gestión Cambiemos ya se acerca a casi dos salarios completos.

Cauto en lo habitual respecto a las declaraciones periodísticas, jornadas atrás en Mar del Plata, luego de debatir con los representantes de su sindicato de todo el país en la reunión anual en esa ciudad balnearia, Caló definió como "el peor de los 14 años que le han tocado para negociar paritarias", lo cual resulta ilustrativo tanto para su organización como para el resto del espectro gremial que haciendo "arquitectura salarial" buscó ganar algunos puntos en adicionales o tramos de acuerdo, amén de la fragilidad de las denominadas cláusulas de revisión que no significan ajuste automático por inflación, sino tener que volver a sentarse a la mesa para continuar negociando.