En medio de una profunda recesión que golpea a múltiples sectores industriales, Mondelez frenará la producción en su planta de Pacheco, una de las mayores del país. Se trata de una medida sin precedentes que impactará en algo más de 2.300 trabajadores, que temen por el escenario de los próximos meses.
La empresa justificó el parate en el sobrestock generado por el desplome del consumo y la fuerte caída de ventas, que según delegados acumuló unas 13 mil toneladas menos respecto al año pasado. Se trata de la primera vez que la compañía detiene totalmente su actividad por motivos productivos y no por cuestiones técnicas.
Se otorgará una semana de vacaciones general y una de licencia paga para evitar un conflicto gremial mayor. Además habrá sectores que estarán sin actividad por una semana más.
“No había ocurrido nunca esto. Es parte del industricidio al que nos está llevando este Gobierno con caída de la demanda e ingreso de las importaciones”, dijo Sergio Escalante el titular del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA).
Aunque la empresa garantizó el pago de salarios, bono de fin de año, beneficios tradicionales y un voucher de $53.000 para la proveeduría interna, la inquietud persiste porque no hay perspectivas de revertirse la situación general.
“Encima el Gobierno quiere aprobar una Reforma Laboral. La mejor Reforma Laboral que se puede hacer en la Argentina es crear trabajo”, planteó Escalante.
Con el parate fijado hasta el 5 de enero, el principal interrogante es qué ocurrirá a partir del regreso de las vacaciones. Mientras tanto, el sindicato se mantiene en alerta y continúa negociando con la empresa para evitar un desenlace más grave.

Comentá la nota