Mauro López es el secretario general de la Asociacion de Repartidores Independientes. Posee una zona de actuación más allá de La Plata, algunos distritos del Conurbano bonaerense y algunas provincias al norte.

Hace algún tiempo cuenta con el paraguas gremial de la UGATT, organización del Transporte liderada por el fraternal Omar Maturano y tiene un horizonte: que su gremio sea reconocido por el Ministerio de Trabajo y confeccionar un convenio colectivo de trabajo, hecho que en algún tiempo tomará forma.

Pero además, existe otro problema que hace a la diaria del trabajo de los deliverys y es el aporte voluntario que realizan los consumidores en pos de reconocer el trabajo del repartidor, comúnmente conocido como propina. “Es un tema que estamos trabajando en profundidad, está bueno que  el usuario entienda que la propina virtual no le llega, tenemos compañeros que el usuario le dice que le pone una cantidad de propina (a través de la app) pero a la hora de cerrar la jornada, la propina que le manda la aplicación no es la completa”, cuenta López. Es decir: la propina de los repartidores, en muchísimos casos se la queda la empresa. El colmo.

Sostiene que “hay muchos errores en los contratos con las plataformas” y que no “entiende como el Gobierno no participa de esos contratos” y le apunta a la evasión impositiva de las compañías. El monotributo es clave en la discusión.

El joven dirigente gremial además se sumerge en la lucha por eliminar los rankings por los cuales los trabajadores se disputan los envíos y así engrosar los ingresos diarios. “Cuanto mejor calificado estés, más te pagan por pedido”, cuenta sobre los escalafones que van del 1 al 7. “Los que están primeros son generalmente los amigos de los coordinadores; “Generan disputa entre los compañeros y produce que haya accidentes porque los compañeros se sacrifican un poco más y están permanentemente expuestos a los accidentes de tránsito”.

López busca la participación de ASRI en el debate sobre el proyecto de ley que se discutió en el Parlamento bonaerense, del cual se queja por no haber sido consultado y que pretende regular la actividad en la provincia de Buenos Aires.