La Unión Tranviarios Automotor (UTA) anunció un paro total de colectivos en todo el país para el próximo martes 30 de mayo, tras el fracaso de las negociaciones en una nueva reunión paritaria realizada esta tarde.

La medida de fuerza fue informada desde el gremio que conduce Roberto Fernández a través de un breve comunicado de prensa, donde señaló que finalizó «la audiencia convocada por el Ministerio de Trabajo de la Nación, no habiéndose acordado el aumento salarial».

Por eso es que «esta entidad sindical ratifica que, de no obtenerse el incremento pedido para la próxima audiencia, y con la finalización de la conciliación obligatoria, se iniciarán inmediatamente medidas de fuerza gremial, a partir de las 00 horas del día martes 30 de mayo, en todo el territorio del país».

Hay que recordar que tras un anuncio similar de la UTA, el Ministerio de Trabajo frenó una medida de fuerza que estaba prevista para el 19 de mayo y sentó a las cámaras empresarias y a los representantes de los choferes de colectivos a renegociar salarios. 

La UTA pide un incremento retroactivo

Pero, al menos hasta el momento, el entendimiento entre las partes está lejos de lograrse. Y desde la UTA se apunta que el acuerdo firmado en febrero de 2023 quedó desfasado producto de la inflación, por lo cual exige una serie de mecanismos de compensación para sostener el nivel adquisitivo de los salarios. 

La UTA emitió un breve comunicado para anunciar el lanzamiento del paro.

En esa línea es que pide un incremento retroactivo, para que el básico desde abril último sea de 262 mil pesos. A su vez, reclama un bono único no remunerativo de 32 mil pesos y viáticos diarios para todos los trabajadores del sector, pedidos que los empresarios dicen que no pueden solventar.

Respecto al tema de los subsidios, y según informó días atrás la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), los operadores no recibieron respuesta de Transporte «en relación a las deudas impagas de subsidios».

Y tampoco se pronunciaron desde la cartera laboral respecto «al persistente atraso en los cálculos de los mismos (que cubren el 85% de los costos), debido a la erosión inflacionaria».

Los empresarios señalaron que, ante la falta de ingreso del dinero por parte de la cartera nacional, «no hay posibilidad de avance en las actuales condiciones».

Una «urgente actualización» de la tarifa

Y por medio de un comunicado hicieron un llamado «a la responsabilidad de las autoridades de Transporte para que den cumplimiento a su propio marco normativo, para que la continuidad de los servicios y fuentes laborales sea posible».

Al respecto, el jueves de la semana pasada la UTA ya le había advertido a las cámaras que nuclean a las compañías prestadoras de servicios de colectivos en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) que era «difícil» brindar el servicio. 

Además, informaron que mantenían el «estado de alerta», que había sido declarado ante el impedimento argumentado una semana atrás por las compañías para avanzar con una nueva revisión salarial. 

En paralelo también continuaban reclamando a Transporte que se activara una «urgente actualización» de la tarifa, para adecuar los subsidios del Fondo Compensador y poder cubrir la diferencia operativa.