Imponente movilización sindical contra despidos

Bajo el lema "Basta de despidos", la marcha convocó a varios gremios que forman parte de la Corriente Federal de Trabajadores. Se reunieron en la rotonda del puente Mitre y caminaron hasta la Municipalidad, donde entregaron un petitorio a la secretaria de Gobierno, Rita Sallaberry.

El sindicato de ATILRA, apoyado por otras asociaciones gremiales, realizó una importante marcha para reclamar la regularización de los trabajadores de la empresa Lácteos Mepi, ubicada en el barrio Universidad, donde la semana pasada se desató un conflicto. Se calcula que participaron cerca de 2.000 personas. 

Bajo el lema "Basta de despidos", los trabajadores se reunieron en la rotonda de la bajada del puente Mitre, en el barrio El Quinto, y marcharon por el centro de la ciudad. Por la calle Mitre, caminaron hasta Colón y se dirigieron a la Municipalidad, donde le entregaron un petitorio a la secretaria de Gobierno, Rita Sallaberry.

La imponente caravana siguió hasta el Ministerio de Trabajo ubicado en Dr. Muñiz y Mariano Moreno, donde tuvo lugar una nueva audiencia para destrabar el conflicto iniciado por el despido de un trabajador que “estaba en negro”, tal como denunciaron desde ATILRA, y que finalmente fue reincorporado. 

En la marcha también participaron representantes de varios gremios que forman parte de la Corriente Federal de Trabajadores CGT, como por ejemplo Satsaid, Curtidores, Sitraju, Cerveceros, Sadop, La Bancaria, STM Lujan, y Gráficos.

El primer encuentro en la delegación local de la cartela laboral se había realizado el jueves pasado. Allí, el sindicato ATILRA solicitó la conciliación obligatoria para que retrajera la situación a antes del paro, se reincorporara al trabajador despedido y se iniciara un proceso de negociación. Sin embargo, esto fue descartado por el Ministerio.

Por eso, durante el fin de semana se mantuvieron las protestas en la puerta de la fábrica láctea. Heber Ríos, secretario general de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (ATILRA), sostuvo que “venimos reclamando hace varias semanas por intermedio del Ministerio de Trabajo de la Delegación Luján, que realizó una inspección en la fábrica y detectó que efectivamente había una serie de irregularidades en cuanto al pago de los salarios y el registro de algunos trabajadores. Es decir, que estaban trabajando en negro. Uno de los casos extremos es el caso de Martín que presta hace 24 años servicios en la empresa”.

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