Luego de cuatro años de tensiones, luchas y persecuciones, trabajadores de Vialidad Nacional se dieron un desahogo previo al cambio de gobierno.
La noche macrista fue dura para muchos trabajadores estatales. Fueran neutros u opositores, soportaron múltiples atropellos, en algunos sectores violentos enfrentamientos internos, en una especie de caza de brujas que organizó el gobierno, en su intento de venderse como eficiente.
Basta recordar las acusaciones de "vagos", de "ñoquis", de "grasa militante", de "vividores del Estado" que caían al voleo. Y las consiguientes oleadas de despidos masivos, sólo justificadas por esas acusaciones, el miedo a perder el trabajo de quienes lo mantuvieron, el estrés de tener que convivir en un ambiente laboral de desconfianza y suspicacia, con un salario absolutamente deteriorado por la inflación y unas paritarias cada vez más magras.
La llamada grieta también abonó enfrentamientos gremiales internos. El sálvese quien pueda desatado sacó lo peor de más de uno. Desde dirigentes que entregaron para la lista negra a referentes de listas opositoras, Juntas Internas que negociaron pax romana a cambio de mantenerle el puesto a los propios. Representantes que representaron a pocos.
En el caso de Vialidad se sumó la mentira organizada en forma de campaña electoral, en la que el oficialismo vendió logros que no existieron. Hace unos días la Auditoría Interna de la Dirección de Vialidad Nacional (DNV) emitió un informe y las diferencias en las cifras resultaron escandalosas: de 4000 kilómetros de Rutas Seguras, hicieron 6. De 2800 km. de autopistas, hicieron 365, el 13 por ciento.
Cuando el domingo Argentina decidió un cambio de gobierno, los trabajadores de Vialidad decidieron festejar el triunfo y les dejaron mensajes a varios funcionarios.
#Volvimos #SeVan pic.twitter.com/WT1IzcpI3K
— Gise Wall (@Gisewall) October 28, 2019
Después de cuatro años de persecución y recortes, así recibieron hoy los trabajadores a los funcionarios de Vialidad Nacional.
Todo vuelve. pic.twitter.com/ww6B34TNE1
— Ezequiel Orlando (@ZetaOrlando) October 28, 2019
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