Camioneros impulsa un reclamo por el incumplimiento del pago del adicional de fin de año a los recolectores de basura, que podría reactivar la guerra en las calles. La lista de unidad de la CGTriaca.
Detrás de los esfuerzos oficiales por minimizar la dimensión del 21F, y el nuevo rol opositor del camionero Hugo Moyano, la Casa Rosada cambió su posición respecto a un posible diálogo para romper el hielo. El giro comenzó en boca del ministro de Trabajo Jorge Triaca, pocas horas después del acto: “El diálogo con este Gobierno siempre está abierto, pero no queremos condicionamientos, no queremos mecanismos extorsivos”, le dijo a Infobae. Al día siguiente fue corregido por su jefe inmediato, Marcos Peña. “No sé cuál sería el tema (para hablar) en este contexto. Si quiere reunirse para hablar sobre las cuestiones judiciales, (el presidente Mauricio Macri) no es la persona con la que tiene que juntarse, es otro poder, no el Poder Ejecutivo”, chicaneó el jefe de Gabinete de Ministros, que corrigió al titular de la cartera laboral y mandó al jefe sindical a Tribunales.
“No hubo ningún cambio de discurso, mantenemos la misma posición: no cederemos a extorsiones”, espetó un funcionario de la cartera laboral, para ratificar el nuevo tono de su jefe. Sin embargo, dentro de Balcarce 50, reconocen que la virulencia de la pelea en “algún momento deberá tener un límite”. La cautela oficial, en bambalinas, tiene que ver con un expediente de negociación laboral que se tramita dentro del Ministerio de Trabajo, en la sede de conciliaciones de la avenida Callao al 100, un territorio poblado por funcionarios de carrera que Triaca, muchas veces, prefiere tener lejos.
LA CGTriaca
Si Macri se quiere sentar a hablar, lo voy a hacer”, dijo en declaraciones periodísticas el ex jefe de Camioneros para ratificarle al Gobierno un gesto que no pasó inadvertido dentro de la Casa Rosada. Ocurrió en pleno acto del 21 F, cuando Moyano le pidió a los presentes que no insultaran al Presidente, porque no hacía “falta”. El límite para las asperezas verbales no tuvo las mismas lecturas dentro del Balcarce 50. Los funcionarios del ala del Gabinete que apuesta a minimizar la dimensión de la protesta, lo leyeron como un gesto de debilidad, pero otros añejos conocedores de “Hugo” deslizan que es un gesto que no debería ser despreciado.
Más allá de las especulaciones sobre los gestos del poder, el conflicto con la rama de recolectores de basura ofrece una hoja de ruta para que la pelea pase a otro estadio. El expediente que duerme en las oficinas del Servicio de Conciliación Laboral Obligatoria (SECLO) tendría un giro conflictivo desde la semana próxima, justo cuando el ministro Triaca comience una gira por España, Alemania y Holanda. Arrancará el próximo martes, según anticipó el portal Infogremiales, acompañado por dirigentes cegetistas de estrecho diálogo con el Gobierno como Ramón Ayala, secretario general de las 62 Organizaciones y titular de UATRE; el jefe del gremio de taxistas, Jose Ibarra; su colega del gremio de la alimentación, Rodolfo Daer; el representante de la UTA, Roberto Fernández; el de Luz y Fuerza, Guillermo Moser y Jose Luis Lingeri, cabeza del sindicato de trabajadores de Obras Sanitarias, que mantiene un estrecho diálogo con el ministro del Interior Rogelio Frigerio, a través de las obras que lleva adelante la empresa pública Aguas y Saneamientos (AySA) y del plan de obras de la Secretaría de Recursos Hídricos de la Nación.
La comitiva trabajará sobre tres ejes: la relación Mercosur – Unión Europea, la formación profesional y la exploración de “sistema de diálogo social”, como el que funciona en los Países Bajos. En la Rosada dicen que ese método “cautiva al Presidente”, pero los elogios al diálogo social a la neerlandesa (conocido como Pólder) ya fueron prodigados el año pasado y desde entonces no surgieron prácticas similares en la Argentina. Parte de ese discurso fue cajoneado cuando las primeras mesas de diálogo que convocó el Presidente no llegaron a ninguna parte.
El Ministerio de Trabajo convocó para hoy a las 16 hs una audiencia por el conflicto con los trabajadores de las rama de recolección ,que reclaman legítimamente el bono de fin de año .El mismo en cuestión es un pago que reciben desde hace 6 años y que es un derecho adquirido pic.twitter.com/7Hb4GbCvyx
— infocamioneros (@cgt_camioneros) 19 de febrero de 2018
BASURA DEBAJO DE LA ALFOMBRA. El lunes pasado esa repartición convocó a una “audiencia por el conflicto con los trabajadores de las rama de recolección de basura”, que reclaman el pago del bono de fin de año de 9500 pesos, que las empresas recolectoras pagan desde hace seis años. Fue el resultado de una tensa disputa que protagonizaron Macri y Moyano, cuando el primero era jefe de Gobierno porteño y el segundo el titular del Sindicato de Choferes de Camiones. Los acuerdos de entonces fueron sellados con la intermediación del actual vicejefe comunal Diego Santilli, que en aquellos días era el principal interlocutor en materia de higiene urbana, aunque actualmente padece el enfriamiento de la relación con Moyano.
La audiencia de este lunes se concretó dos días después de una conciliación obligatoria que había dictado la Subsecretaría de Trabajo, Industria y Comercio de la Ciudad de Buenos Aires, que conduce Ezequiel Jarvis, para que los trabajadores recolectores dejaran de trabajar a reglamento.
Los conflictos previos a esa negociación forman parte de la memoria indeleble del PRO, debido al hedor que tuvieron que soportar los entonces funcionarios comunales de Macri, cuando el gremio decidió llenar la Avenida de Mayo de monumentales montañas de basura.
“¿Qué pasaría si la semana que viene Moyano anuncia que la negociación sigue siendo un fracaso y convoca a un paro de Camioneros? ¿Y qué pasaría si se suman las organizaciones sociales, la CTA y otros sindicatos?”, se preguntó una fuente gremial vinculada al moyanismo, que no descartó una medida de fuerza originada el bono de fin de año impago. Ante las consultas de Letra P, en la Casa Rosada temen un escenario similar, dentro de un duelo de conocidos desconfiados que sólo podría desatarse luego de una reunión entre Macri y Moyano.
"Lo que no se puede hacer es ´desclasarse”, yo soy un laburante y estoy orgulloso de serlo y voy a morir en la clase laburante. Algunos gremialistas prefieren estar con los poderosos, como tienen buen pasar creen que pueden pasarse de clase”.#BuenJueves pic.twitter.com/OMTH97o4kQ
— infocamioneros (@cgt_camioneros) 22 de febrero de 2018
La preocupación también late en las oficinas del jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, que este viernes lanzará el programa "Esa es mi cuadra: una iniciativa que busca estimular el compromiso de los vecinos en el mantenimiento de la limpieza de su cuadra", mediante la "bonificación total del impuesto de Alumbrado, Barrido y Limpieza 2019 a aquellos vecinos que se involucren de manera activa en la higiene de la misma".
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