Empresas como Techint hicieron "un festival de precios con el acero que pagó el pueblo argentino"

Empresas como Techint hicieron

El secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) cuestionó al presidente Javier Milei y planteó el camino de un plan de lucha que encabezará la CGT.

Desde poco antes de mediados del siglo XX el movimiento obrero en la Argentina alcanzó un alto nivel de organización, capacidad de negociación y lucha, que lo destacó a nivel latinoamericano. Durante muchos años, uno de los gremios más encumbrados y con mayor poder de fuego y organizativo fue la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), senda que parece retomar con sus actuales dirigentes.

Precisamente, Abel Furlán, secretario general de la UOM y uno de los dirigentes sindicales más escuchados de la Argentina, alzó su voz una vez más y acusó a las grandes corporaciones de estar gobernando el país a través de un advenedizo en la política nacional, el ex panelista de la TV, Javier Milei. Cabe señalar en este sentido, que durante el discurso de apertura de las sesiones ordinarias del Congreso, "nunca escuchamos la palabra 'trabajadores' de la boca del Presidente", recordó Furlán.

Pese a la crítica situación en que está inmersa la actividad, el dirigente metalúrgico dijo que "en los últimos 90 días hubo un festival de precios del acero", y señaló que el grupo Techint, solo en diciembre, incrementó el valor de la chapa casi en un 100 por ciento. Por esta razón, exigió de los empresarios más responsabilidad y "aunque nunca la tuvieron, les pido al menos que tengan algo de sensibilidad". El conflicto está escalando así a pasos agigantados, ya que "la Cámara Siderúrgica se está negando a recomponer los salarios desde diciembre pese a que los balances de las empresas son escandalosos".

Los dichos de Furlán asoman en momentos de una creciente y profunda recesión que obligó a grandes empresas, como Acindar, a suspender la producción en sus cuatro plantas del país, dejando en una gran incertidumbre a más de 1.200 trabajadores que ven en serio riesgo la conservación de sus empleos.

Esta situación inédita, a menos de tres meses de asumido un nuevo gobierno, llevó a la realización de un paro general hace unas semanas y a que sindicalistas de la CGT, en otros tiempos enrolados en el llamado sector dialoguista, pidieran un plan de lucha. No es el caso de Abel Furlán, quien no sólo desplazó mediante elecciones internas a otro histórico como Antonio Caló, sino que siempre estuvo en el ala de los más combativos, tal vez siguiendo las huellas de recordados dirigentes metalúrgicos como Alberto Piccinini.

"No estamos pidiendo un aumento, estamos pidiendo recuperar los salarios después de la pérdida de poder adquisitivo", dijo Furlán y recordó que la UOM ya había anunciado tres paros para marzo, por ahora suspendidos debido a que el Gobierno dictó la conciliación obligatoria. "El ajuste está impactando fuertemente. No tengo dudas en que la CGT va a tener que profundizar su plan de lucha", remarcó en sintonía con otros dirigentes que evalúan la idea de ir hacia otro paro general.

Comentá la nota