En la interna de la CGT, Hugo Moyano presiona para que Octavio Argüello, actual miembro del triunvirato, continúe en su cargo o que su hijo Jerónimo sea designado secretario de Juventud en las elecciones programadas para el 5 de noviembre. Esta postura se enfrenta a la propuesta de los sectores "Gordos" e independientes, que impulsan a dirigentes más jóvenes como Cristian Jerónimo y Jorge Sola para integrar la conducción de la central obrera .

Simultáneamente, en el Sindicato de Camioneros, Hugo Moyano desplazó a dos dirigentes, en lo que se interpreta como una maniobra para consolidar su liderazgo frente a una feroz interna gremial.

Por otro lado, su hijo Pablo Moyano celebra el ascenso del club Deportivo Camioneros a la Primera B Metropolitana, tras vencer por 3 a 1 a Ituzaingó. Este logro deportivo se produce en el estadio Hugo Moyano y con la participación de sus hijos Facundo y Nicolás en el equipo. Pablo, quien preside el club desde que renunció a la CGT, utilizó la ocasión para enviar un mensaje político, criticando al gobierno y expresando su deseo de que el peronismo regrese al poder en las próximas elecciones .

Mientras Hugo Moyano se concentra en fortalecer su posición en el sindicalismo, su hijo Pablo celebra un éxito deportivo que, aunque alejado de la política, también resalta la influencia de la familia Moyano en distintos ámbitos de la sociedad argentina.