El Comité Central Confederal (CCC) de la CGT, que colideran Héctor Daer, Carlos Acuña y Pablo Moyano, decidió para ese día una huelga general nacional de 12 horas a partir del mediodía y una movilización hacia el Congreso en rechazo del decreto de necesidad y urgencia (DNU) y la ley "Bases" enviadas por el Poder Ejecutivo al Parlamento.

Un documento de la Ugatt firmado por el titular del Sindicato de Conductores de Trenes La Fraternidad ratificó el paro y movilización de ese día, aunque garantizó el funcionamiento del transporte público de pasajeros entre la 0 y las 19 "por solicitud de la propia CGT".

"El objetivo es facilitar la concentración y desconcentración de todo aquel ciudadano que quiera ese día expresarse, haciendo uso del derecho constitucional de peticionar ante las autoridades frente a los atropellos disfrazados de DNU y la ley 'Bases' de este adolescente Gobierno. La Ugatt parará el transporte de cargas, la logística y los servicios", aseguró.

Maturano añadió que "no es esta la primera vez que el movimiento obrero organizado, que es la columna vertebral del justicialismo, es atacado por un Gobierno elegido de forma democrática", y sostuvo que durante "la gestión radical de Raúl Alfonsín lo intentaron con la 'Ley Mucci' y alegaron un necesario 'reordenamiento sindical', que fue pensado de manera unilateral por la cartera de Trabajo y sin participación del movimiento obrero".

"La conducción del bloque en la Cámara de Diputados de ese mismo partido centenario no rechaza el DNU en su totalidad, y está de acuerdo con la reforma laboral que plantea el Ejecutivo, lo que implica desconocer su ADN. Tendrá que hacerse cargo", dijo el dirigente.

Maturano reivindicó las palabras que en su momento pronunció el extitular de la CGT, el cervecero Saúl Ubaldini, en ocasión de la 'Ley Mucci': "Estos paladines de la modernización deben saber que ni la fuerza, la represión ni el ánimo separatista del gobierno podrá con la fortaleza de los trabajadores, que elaboran la grandeza nacional".

El dirigente ferroviario ratificó "la voluntad de organicidad respecto de las decisiones que adopte la CGT", y reseñó que el General Juan Domingo Perón ya había enseñado que "estos modernos libertadores y vendepatrias que soportó el país estaban empeñados en destruir la organización sindical, pero el tiempo les demostró que se equivocan".

Maturano aseguró que el 24 de enero debe ser como "el 17 de Octubre"; afirmó que "es preciso honrar la memoria de nuestros padres y abuelos y, como ellos, si hay que ir a la marcha caminando o gateando así debe será", y señaló que ese día hay que cuidar "la armonía, el orden, el buen comportamiento y, en especial, la higiene de la ciudad".

"En 1930 nadie podía ingresar a la Capital Federal sin traje o saco y corbata, porque a los 'negros' o 'cabecitas' se les tenía prohibido. Hasta el 17 de Octubre, cuando los llamados 'descamisados' coparon la ciudad. Hoy es preciso hacerlo más organizadamente", afirmó.