Omar Maturano: “Si tenemos que poner más plata para las obras sociales, quiero que la manejemos los sindicalistas"

Omar Maturano: “Si tenemos que poner más plata para las obras sociales, quiero que la manejemos los sindicalistas

El líder de La Fraternidad rechazó el aumento del aporte al sistema sindical de salud que analizan la CGT y el Gobierno e insistió en la eliminación del Impuesto a las Ganancias. “Este no es un gobierno peronista. Es de coalición, como el Frepaso”, dijo.

Por Ricardo Carpena.

Hasta ahora, Omar Maturano está solo. Es el único que dijo que no quiere saber nada con el aumento del aporte a las obras sociales por parte de trabajadores y empleadores que analizan el Gobierno y la CGT (que él integra). El secretario general de la Fraternidad, sindicato que agrupa a los conductores de locomotoras, no se calla. Y se nota que está enojado. No les apunta a sus colegas de la central obrera sino que dispara con munición pesada contra el Gobierno y los políticos en general, a quienes acusa de manejar la plata de las obras sociales y “llevársela para otro lado”.

En la entrevista con Infobae, el secretario de Políticas de Empleo de la CGT y adjunto de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) reclamó que el sindicalismo maneje la plata de las obras sociales y reflotó el reclamo contra el Impuesto a las Ganancias, que Alberto Fernández, según destacó, había prometido eliminar “cuando la economía se estabilice”. “Hay que esperar y ser prudente, pero la paciencia tiene un límite”, advirtió.

Además, se mostró particularmente duro cuando consideró que el Gobierno “no es peronista” sino “de coalición” y precisó que “es parecido al Frepaso, sólo que el Presidente no es radical; después es lo mismo”.

-El Gobierno y la CGT están analizando la suba del aporte para sostener las obras sociales. ¿Qué le parece la idea?

-No estoy de acuerdo con subir el aporte de los trabajadores. Es un proyecto que está en estudio. Ayer hablé con (Héctor) Daer y todavía no está terminado. Y tiene que ir a las dos cámaras para aprobarse. El problema fue que en los 90 se descentralizaron todas las obras sociales y cada uno hizo lo que quería. Eso jugó en contra de las obras sociales más pequeñas, aparecieron las prepagas y hubo muchas que son sellos de goma. Empezó a recaudar el Estado Nacional, que les gira los fondos a las obras sociales, pero se empezaron a dividir los reintegros según las enfermedades, graves o leves, y después te daban la plata que ellos querían. Igual que en el PAMI, que recauda 4.500 pesos por jubilado y a nosotros nos dan menos de 1.000 pesos. Y el PAMI se queda con los aportes del 3% de los activos y del 3% de los jubilados.

Alberto Fernández y los principales dirigentes sindicales (Maturano, de camisa celeste, está detrás del Presidente)

-¿Qué otros problemas tienen en las obras sociales?

-También tenemos que atender a los monotributistas, que pagan dos pesos y hay que darles servicios igual, y las nuevas enfermedades, que se pagan en dólares. La mayoría de las obras sociales está en quiebra y ahora quieren sacarnos el 1% a nosotros y el 1% al patrón. Sobre lo del patrón no opino. ¿Vamos a poner otro 1% y la plata la va a manejar el Estado Nacional, que después se la lleva para otro lado y no cubre las necesidades de las obras sociales? No quiero eso. Si tenemos que poner más plata, quiero que la administremos nosotros. Habrá que darles una ayuda a las obras sociales, pero mañana también nos van a decir que hay que poner el 2% más de jubilación y vamos a ponerlo si les dan los aumentos a los jubilados. Si no, ¿para qué quieren el 2% más? La ANSES es todo papeles, vende esto y aquello, es toda plata de los trabajadores y después no tenemos para pagarles a los jubilados. Estoy en contra de eso, en contra del sistema que manejan el Estado Nacional y los políticos. Un presidente, un diputado o un senador está cuatro días en el cargo, se jubila y cobra el 100%. ¿Y los trabajadores normales tenemos que aportar 30 o 40 años? ¿Qué nos pasa? ¿No hacen los aportes como nosotros y manejan nuestra plata?

-De todas formas, usted reclama que el sindicalismo esté al frente de la Superintendencia de Servicios de Salud, que maneja los fondos de las obras sociales.

-Sí, hoy no tenemos representatividad. Ponemos la plata y no tenemos un representante que diga si están bien hechas las cosas y que rinda cuentas adentro de la CGT. Tenemos que tenerlo para ver cómo se está administrando la plata. Hoy no tenemos representantes en el PAMI, en la ANSES, en el reparto de la plata de las obras sociales. No queremos eso. Estamos de acuerdo en poner el 1% más, siempre y cuando lo manejen los trabajadores.

-¿La CGT pidió tener presencia en esos organismos?

-La CGT está trabajando en el proyecto y seguramente lo tendrá que pedir. Pero me está preocupando que hoy es el 1% más para las obras sociales y que mañana nos digan que hay poner el 2% más para la ANSES, que está hecha pelota. ¿Siempre vamos a poner nosotros mientras todavía está dando vueltas el Impuesto a las Grandes Fortunas? Nosotros sí ponemos para el Impuesto a las Ganancias: nos sacan un salario y medio y no sabemos dónde va esa plata. Todo lo manejan ellos y hacen lo que quieren con la plata. Tenemos que aportar 30 años para jubilarnos y hay gente a la que le dan la jubilación y no aporta. El sistema es solidario, ¿pero solidario hasta dónde?

-¿A quién se refiere cuando habla de “ellos”? ¿Al Gobierno?

-Y claro, a los políticos. Hoy es éste, mañana va a ser otro. El anterior hizo lo mismo. La plata de las obras sociales la tiene que manejar un sindicalista. ¡Si ellos no ponen un peso! Lo ponen los patrones y los trabajadores. No sale plata del Gobierno hacia las obras sociales. ¿Y la que nos deben desde 1983 hasta la fecha? Nunca nos devolvieron la plata.

Omar Maturano. Pablo Moyano, Juan Carlos Schmid y Juan Pablo Brey son cuatro dirigentes de la CATT

-¿A cuánto asciende la deuda del Estado con las obras sociales?

-Deben ser 30 mil millones de pesos. Y nos sacaron 8 mil millones en la época de Macri para los hospitales nacionales. Les sacan a los trabajadores para eso y nosotros pagamos nuestra obra social aparte. ¡Y todavía nos descuentan Impuestos a las Ganancias, no tenemos paritarias y nos quieren descontar el 1% más! Están locos.

-Pero el Gobierno les está dando plata desde marzo para compensar la caída de la recaudación.

-No nos está dando plata, nos está devolviendo. Si todavía nos deben... Esa es plata nuestra.

-Usted dijo esta semana en un comunicado algo muy duro y que es raro escuchar desde el sindicalismo: “Los gobiernos manejaron los fondos (de las obras sociales) en un intento de disciplinar al movimiento obrero mediante la distribución arbitraria del dinero, su retención y la incorporación de prestaciones obligatorias sin especificar el origen de la plata para cubrir el incremento del gasto”.

-Claro, si sos bueno te los dan, y si sos malo, no. Estoy en contra. Tengo que salir a decirlo porque si nadie habla… Todos “sí, sí, sí”. Estoy adentro de la CGT, así que voy a dar mi opinión de nuevo.

-¿Cómo es la situación de la obra social de su sindicato?

-Nos deben unos 60 millones de pesos de aportes. Tenemos problemas como todas las obras sociales, y más con el COVID: algunas veces lo cubre la obra social y otras, la ART. Hay compañeros que están prestando servicios y la ART dice que la enfermedad no es un accidente de trabajo.

-¿Por qué el sistema de obras sociales tiene estos problemas que usted critica?

-Porque fue hecho en los años 90. En esa época estábamos preocupados porque nos despedían y privatizaban las empresas nacionales. La Fraternidad fue el único que hizo 45 días de paro y otros no hicieron nada. No estábamos preocupados por las obras sociales sino por los puestos de trabajo.

Ginés González García negocia con la CGT la reforma de las obras sociales

-Pero hubo un sector del sindicalismo que apoyó esos cambios al sistema de obras sociales.

-Sí, bueno, también apoyaron el plan privatizador. Nosotros no lo apoyamos. Perdimos porque de 90 mil trabajadores que teníamos quedaron 14 mil. Perdimos, pero luchamos. Y no nos quedamos callados.

-Igual, la desregulación de las obras sociales se dispuso en los años noventa, pero luego hubo gobiernos peronistas que mantuvieron el sistema sin cambios, como los de Néstor y Cristina Kirchner.

-Y... porque tienen la chequera. Con las provincias hacen lo mismo. Es como en los clubes de fútbol: el que tiene la chequera hace lo que quiere. Tenemos que cambiar esa metodología. Y salir a decir que somos los que ponemos la plata y que por eso la plata tiene que venir a las obras sociales y volver al trabajador. O hablar sobre el Impuesto a las Ganancias. ¿Le parece bien que nos puedan descontar casi dos sueldos al año? ¿Y a los marítimos cuatro sueldos?

-¿La CGT no hace más reclamos contra el Impuesto a las Ganancias?

-Los que siempre hicimos el reclamo fuimos los gremios del transporte porque nos toca a todos. Los otros sueldos no se tocan. Los del transporte sí se tocan porque pasás los 60 mil pesos y te empiezan a descontar. Ahora, si no levantan el mínimo no imponible nos va a tocar a todos. Ahí veremos qué harán. Algunos que se quejan porque no quieren pagar más impuestos. Nosotros lo venimos pagando desde la época de Machinea. Siempre tenemos que poner, poner y poner. Estamos cansados de poner.

-Es cierto que la eliminación de Ganancias tampoco está en la agenda del Gobierno ni de la oposición.

-Apenas asumió, el Presidente nos dijo que estaba en su agenda, que había que esperar a que se estabilizara la economía y que ahí ningún trabajador iba a pagar el Impuesto a las Ganancias. Estamos esperando que la economía se estabilice. Vamos a tener que esperar mucho tiempo... Macri también dijo que el trabajador no tenía que pagar Ganancias. Pasaron cuatro años y lo seguimos pagando. Hay que esperar y ser prudente, pero la paciencia tiene un límite.

La CATT, en su lucha contra el Impuesto a las Ganancias: Juan Pablo Brey, Julio González Insfrán, Juan Carlos Schmid y Omar Maturano

-Pero este es un gobierno peronista, como la mayoría de ustedes, los sindicalistas. Podrían plantearlo.

-No, no, este es un gobierno de coalición, no es peronista. Si no, tendríamos un presidente del Banco Central peronista, no sería radical.

-Pero son todas expresiones del peronismo: está el kirchnerismo, el massismo, el albertismo.

-Son expresiones, pero con algunas estamos de acuerdo y con otras no.

-¿Entonces no es un gobierno peronista?

-No, es de coalición. Es parecido al Frepaso, sólo que el Presidente no es radical. Después es lo mismo.

-¿Por qué el Gobierno sigue sin darle participación orgánica a la CGT, que reclama desde hace meses que se forme un comité postpandemia para analizar medidas de reactivación?

-Y... seguramente tendrá un plan mejor del que le va a presentar la CGT (se ríe). Por eso no le da bola.

-¿Existe un plan del Gobierno para salir de la crisis?

-Hablaban de un plan de 60 puntos. Todavía no conocemos ninguno. La CGT tiene que ir con un plan para la postpandemia, pero el primer punto es la creación de fuentes de trabajo y la continuidad de los otros empleos.

-Alberto Fernández les prometió a seis dirigentes de la CGT hace diez días que iba a convocarlos.

-Ojalá lo haga. Estaremos ahí para tratar de ayudar. Tampoco queremos que esto se quede estancado y después vengan más problemas de los que tenemos.

Seis dirigentes de la CGT analizaron con el Presidente en Olivos la reformulación del sistema de obras sociales

-¿Hay algunos indicios de mejoras socioeconómicas? ¿Cómo ve la situación actual?

-Mal. No queremos llegar al 50% de gente en la pobreza. Hoy se está evitando con la ayuda del Gobierno a las empresas, pero eso se va a acabar porque vamos a tener que salir a trabajar. Pero, ¿quién vuelve al trabajo? Hay que ver si están abiertos los comercios o las fábricas. Por ahí están cerrados y eso va a traer más desesperación, más ayuda a la gente que no tiene. Estoy de acuerdo en tener un fondo garantizado para eso, pero tenemos que saber de dónde sale la plata.

-¿El Gobierno está planificando correctamente la salida de la cuarentena?

-No sé si lo está planificando, sé lo que estamos viviendo en este momento. No nos dijeron cuáles eran los 60 puntos… La única medida es el cepo. Pero, ¿quién va a comprar dólares? Los trabajadores no pueden comprarlos.

-¿Qué está pasando en materia salarial?

-No hay paritarias. Nosotros no pudimos cerrar el 2019 y también estamos reclamando el trimestre enero-marzo. Nos están dando un bono de 5.000 pesos para los que están trabajando como esenciales. Los que están en su casa por riesgo o mayor de 60 años, cobran su salario.

-¿Cuál es el argumento que les dan para no otorgar un aumento?

-Que está la pandemia, que no hay plata para nadie. Estamos en un sándwich: ellos nos dicen que no y los trabajadores nos dicen que sí. Estamos en el medio como el salame. De última tendremos que salir a pelear por nuestros intereses.

"Yo no quiero la CGT camionera, quiero una CGT que represente a todos los trabajadores", afirmó Maturano

-¿Se reunirá la CGT para analizar esta situación que usted describe?

-Seguramente nos vamos a reunir porque, dada la situación, tenemos que salir con algo para que nos escuchen. Porque reunirse, hablar ahí y no decir nada… Eso está a cargo de los dos secretarios generales, que se tienen que hacer cargo de lo que está pasando. Para eso son secretarios generales…

-¿Habrá unidad sindical para conformar una nueva CGT en 2021?

-Unidad tiene que haber con todos los sectores. Estamos hablando de sectores confederados, no de sectores que no lo están. Los que no están dentro de la CGT no tienen nada que hacer.

-¿Quiere decir que no se podrán sumar la CTA ni los movimientos sociales?

-Nooo, no tienen nada que hacer. Con ellos conversamos para ver cómo se sale de la crisis, pero en la CGT tienen que estar los sindicatos confederados. Igual no creo que quieran estar esos muchachos en la CGT…

-Alberto Fernández dijo que quiere que la CTA se sume a la CGT.

-Puede pedir lo que quiera, pero la decisión pasa por nosotros y no por el presidente de la Nación. Esta es una discusión de los trabajadores. Igual, no creo que (el líder de la CTA de los Trabajadores, Hugo) Yasky quiera estar dentro de la CGT. El decía que nosotros éramos burócratas. ¿Ahora quiere ser burócrata? Si quiere serlo veremos si lo aceptamos (se ríe).

-¿Habrá un solo secretario general o un triunvirato para liderar la CGT?

-Ojalá haya un solo secretario general, como corresponde.

Para Maturano, los movimientos sociales "no tienen nada que hacer" adentro de la CGT

-Hoy se perfilan como candidatos Héctor Daer y Pablo Moyano. ¿A quién elegiría?

-Elegiría al que elige la mayoría, si estoy de acuerdo. Si no, no. Candidato puede ser cualquiera que esté en condiciones.

-¿A Pablo Moyano no lo ve en condiciones?

-No es no lo vea, pero tendremos que escuchar qué CGT quiere. Yo no quiero la CGT camionera, quiero una CGT que represente a todos los trabajadores, y esa sería una gran diferencia.

-¿Imagina una CGT dependiente o con autonomía del Gobierno?

-La CGT tiene que ser independiente de cualquier partido político. Tiene que defender los derechos de los trabajadores, sea un gobierno peronista, de coalición, radical, socialista, comunista... el gobierno que sea. Tenemos que defender los derechos de los trabajadores, y nada más. Y después están las 62 Organizaciones, que es el brazo político de la CGT, como era antes. Además, tenemos compañeros radicales, socialistas, liberales. Tenemos que pensar primero en los compañeros y después en la política. Tenemos que pensar como piensa el ciudadano: “No quiero que mi sindicato se meta en política, quiero que defienda el trabajo, las leyes laborales, el salario”. Eso tiene que hacer la CGT.

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