La devaluación, la recesión y la caída del consumo fueron tres factores que impactaron en la fuerza laboral activa. La mitad de los desocupados son jóvenes
La devaluación, la recesión y la caída del consumo fueron tres factores que impactaron en la fuerza laboral activa. La mitad de los desocupados son jóvenes
La desocupación en los principales centros urbanos bonaerenses avanzó 1,4 puntos porcentuales. En la Provincia de Buenos Aires ya roza los dos dígitos.
El Desempleo y la desigualdad y la pobreza, son las principales preocupaciones en una encuesta realizada por IPSO en 30 países. El sesgo de la era Javier Milei.
El último dato que arrojó el Indec respecto a las personas sin trabajo encendieron las alarmas con una problemática que va en alza. Baja en las tasas de empleo, despidos y alarmas en los barrios.
El impacto de la destrucción de empleo en la gestión libertaria es particularmente grave para la juventud: la desocupación alcanzó al 19,2% de mujeres y 15,1% de varones, escalando al porcentaje más elevado desde la crisis de pandemia. Casi dos de cada tres jóvenes viven en hogares pobres.
Los datos del segundo trimestre del año pueden superar los 10 puntos, según las principales proyecciones que se hacen. Esto instalaría un tema desactivado hace años. En el país, se multiplican las empresas en crisis, de la mano de la recesión y el modelo libertario.
En el primer trimestre la desocupación escaló al 7,9%. Ya son casi dos millones los que no tienen trabajo y el foco de la destrucción se centra en el empleo registrado del sector privado. En los grandes centros urbanos vuelve en fantasma de los dos dígitos de desocupación.
Aunque la tasa de empleo en la Ciudad de Buenos Aires se mantuvo estable durante el primer trimestre de 2025, la desocupación aumentó levemente y alcanzó al 7,8% de la población activa. El informe del IDECBA revela marcadas desigualdades por género, edad y zona geográfica, además de un crecimiento en la subocupación horaria y una persistente precarización laboral.
Durante los primeros tres meses de 2025, un total de 30.560 personas comenzaron a cobrar el seguro por desempleo en Argentina, tras haber sido despedidas sin causa y no lograr reinsertarse en el mercado laboral. Los datos surgen del último informe de la Seguridad Social publicado en el Boletín Oficial, que expone un crecimiento sostenido de la desocupación, especialmente en sectores clave como la industria y la construcción.
La mejora del 7% en los salarios reales privados registrados respecto de noviembre de 2023 que celebra el oficialismo no proviene de aumentos reales en las paritarias —que siguen pisadas— sino del aumento de la intensidad laboral: las horas extra trabajadas aumentaron 5,1% en el periodo.
Son datos que surgen del informe periódico que publica la SRT. Desde que asumió Javier Milei y hasta enero de 2024, se redujo la cantidad de empleadores en 12.986 casos. «Servicio de transporte y almacenamiento» es el sector más afectado, con una pérdida de 3.046 empleadores.
Según un nuevo informe del Indec, la tasa de informalidad promedio es de 42%, pero llega al 62% entre los cuentapropistas; el problema está mencionado en el documento del FMI, que pide una reforma laboral
La paralización de la obra pública y el desplome de la construcción privada, impulsados por el plan económico del presidente Javier Milei, golpean de lleno a la industria ceramista y ladrillera. Cerámica Fanelli y Cerro Negro iniciaron despidos y cierres de líneas de producción.
El gobierno de Javier Milei enfrenta un escenario económico crítico: caída del consumo, inflación persistente y un aumento del desempleo que golpea a los sectores más vulnerables. Mientras el ajuste destruye el poder adquisitivo y la recesión se profundiza, la CGT, tras meses de pasividad, anunció medidas de fuerza. La crisis social y laboral, sumada a la especulación financiera, aviva el descontento en las calles y pone a prueba la resistencia del movimiento obrero.
Un estudio de ManpowerGroup reveló que Argentina presenta las proyecciones de contratación más débiles de América para el segundo trimestre de 2025. La Encuesta de Expectativas de Empleo (ENE) arrojó un índice del 0%, lo que refleja un estancamiento en el mercado laboral, en contraste con otros países del continente que muestran signos de crecimiento. A pesar de la estabilidad macroeconómica reciente, las empresas aún no se muestran dispuestas a aumentar sus plantillas.
En paralelo, hubo una baja del empleo. El incremento en los informales y los cuentapropistas amortiguó la suba de la desocupación
El ajuste afectó tanto a la caída de puestos de trabajo en el sector estatal como en privados, en especial por la retracción en la industria y la construcción, vía obra pública
Pese al leve crecimiento de fines del 2024, un informe alertó que habría que esperar, al menos, hasta enero de 2026 para alcanzar los niveles previos al gobierno de Milei. Más informalidad y cuentapropismo marcan un año que arrancó con poco margen de optimismo.
Un informe de CEPA revela un notable retroceso en el mercado laboral Entre noviembre de 2023 y octubre de 2024, tanto en la cantidad de empleadores como en puestos de trabajo formales, con sectores clave como la construcción y el comercio particularmente afectados.
Hace mucho tiempo que el empleo asalariado registrado en el sector privado no crece de manera sustantiva. El achicamiento mes a mes iniciado en la segunda mitad de 2023 habría empezado lentamente a revertirse, pero la situación es muy diferentes por sectores y tipo de relación.
Lejos de la narrativa ideológica fatalista que intentan imponer algunos megamillonarios, el flamante juguete del Capital no vino a reemplazar nuestro trabajo, vino a degradarlo.
Un documento que realizó el Centro de Investigación y Formación (CIFRA) de la Central de los Trabajadores de Argentina (CTA) da números alarmantes.
El gobierno montó una comparsa narrativa con la desaceleración de la inflación, pero la fiesta macro se ancla en salarios que pierden contra la canasta básica, el empleo de calidad que se reduce y miles de pymes que cierran sus puertas. En tensa calma, el ajuste golpea a los trabajadores y profundiza la precarización laboral.
En un año marcado por la recesión, el empleo registrado experimentó un fuerte retroceso, en una economía donde más del 30% de la actividad está en negro. Pese a que en octubre último mejoró el empleo asalariado privado en 5.600 personas, la cantidad de personas con trabajo registrado retrocedió 0,2%, con unos 25.600 trabajadores menos.
Los números surgen de los últimos datos publicados por la Secretaría de Trabajo de la Nación. Solo crecen los monotributistas. En el primer año de gestión de Javier Milei se perdieron casi 200 mil puestos de trabajo.
El dueño de FATE, Javier Madanes Quintanilla, aseguró que tiene preocupación por lo que ocurre en la actividad. «Se perdió, en las distintas plantas del sector, el 30% del empleo», planteó.
El año termina con niveles alarmantes de crecimiento del desempleo en casi todo el país, además de la precarizacion relacionada con el aumento de la proporción de monotributistas.
El desempleo se ubicó en el 6,9%, en el tercer trimestre, cifra que implicó un descenso en comparación con el trimestre anterior pero que se ubicó por encima del dato de 2023, informó esta tarde el Instituto Nacional de Estadística y Censos de la República Argentina (INDEC).
El 72% señala a la falta de experiencia como el principal obstáculo, y siete de cada diez termina desempeñándose en actividades que no son de su interés.
Desde la llegada de Javier Milei al gobierno, la pérdida de empleos en el sector privado formal alcanza a cerca de 140.000 personas a nivel nacional, de las cuales más de 60.000 corresponden a la Provincia de Buenos Aires. La paralización de la obra pública y la caída del poder adquisitivo son los principales factores detrás de esta crisis laboral.
El empleo privado registrado en Argentina sigue en caída. Según los últimos datos correspondientes al mes de julio de 2024, se perdieron 8.890 puestos de trabajo en este sector. Desde la asunción del gobierno de Javier Milei, hace ocho meses, la destrucción de empleo totaliza 146.465 puestos.
La crisis del empleo en Argentina golpea con fuerza a los jóvenes, quienes son los más afectados en un mercado laboral que ofrece cada vez menos oportunidades.
La inflación y el dólar cedieron en las respuestas de la gente, dado que la mayor incertidumbre gana terreno. Los valores actuales superan lo observado en el momento más severo de la crisis cambiaria del año 2018.
La tasa de desocupación de la Ciudad de Buenos Aires creció del 6,8% al 7,3% en el segundo trimestre de 2024, su nivel más alto en dos años, según el informe «Indicadores laborales» del Instituto de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires (IDECBA). Los números empiezan a reflejar los problemas de empleo y se espera que empeoren.
El trabajo registrado creció en 12 mil puestos en junio pero incluye a los monotributistas que, desde noviembre de 2023, sumaron 165 mil, una suba del 8%.
El Gobierno destacó que no cambió la cifra de desempleo contra el mes anterior. Desde el sindicalismo advierten que no se puede destacar un cambio de tendencia y que siguen altas las suspensiones.
La crisis económica que atraviesa Argentina se está manifestando con fuerza en el empleo formal privado, afectando desigualmente a las provincias del país, de acuerdo a un informe de una consultora.
El desempleo y la informalidad afectan a más de la mitad de las y los trabajadores jóvenes en el mundo y al menos 2 de cada 3 que tienen algún tipo de ingreso laboral teme perderlo. Mientras organismos internacionales exigen más Estado, el gobierno de Milei pone en marcha una reforma regresiva.
Un nuevo informe de la OIT revela altos porcentajes de jóvenes que están sin empleo y que no están estudiando o en formación, así como brechas regionales y de género, además de una creciente ansiedad entre los jóvenes frente al trabajo, a pesar de las tendencias alentadoras en la desocupación juvenil a nivel mundial.