El moyanismo y las dos CTA difundieron este miércoles una solicitada donde lanzaron una advertencia al Gobierno nacional respecto al acuerdo con el FMI, al reclamar que «la deuda no la paguen los de abajo».

Además, plantearon prorrogar el aporte a las grandes fortunas, aunque apuntaron que el mismo tiene que recaer sobre «los que fugaron divisas».

La solicitada lleva la firma de muchos dirigentes del movimiento sindical y aseguraron que son los que siguen «sosteniendo las banderas por un país con Paz, Pan y Trabajo», en coincidencia con los 40 años de la famosa marcha que encabezó la CGT de Saúl Ubaldini en el tramo final de la dictadura.

Entre ellos figuran Pablo Moyano, Hugo Yasky, Sergio Palazzo, Víctor Santamaría, Héctor Amichetti, Mario Manrique, Ricardo Peidro, Hugo Godoy, Omar Plaini, Daniel Ricci, Beto Pianelli, Edgardo Llano, Walter Correa, Daniel Yofra, Sonia Alesso, Horacio Arreceygor y Roberto Baradel.

El texto difundido comienza con un repaso histórico, señalando que «el Movimiento Obrero y el pueblo argentino hemos sufrido muchos momentos de adversidad a lo largo de la historia. Sin duda, la dictadura genocida de 1976 fue el peor de todos ellos».

Y apunta que «aún en medio del terror, la tortura y las desapariciones, cuya explicación estaba como afirmó valientemente Rodolfo Walsh en la ‘atrocidad aún mayor de la miseria planificada’ de su política económica, las trabajadoras y los trabajadores de nuestro país no dejamos de resistir ante el poder unificado de las armas y el capital financiero».

Luego continúa por el recuerdo de diferentes momentos históricos y se compara lo vivido con la situación actual: «Hoy enfrentamos la misma disputa de intereses, la misma lucha entre los que quieren una Argentina que deje afuera al 70 u 80 por ciento de la población para asegurar sus negocios y los que queremos un país con igualdad y justicia en que todos y todas vivamos dignamente».

«Los beneficiarios siempre son los mismos»

Además, se asegura que «en cada proceso de endeudamiento externo y especulación financiera como el iniciado por Videla y Martínez de Hoz, o el de Macri y su gobierno de ricos para ricos, los beneficiarios son los mismos».

Así, se señala que «hoy sufrimos esas consecuencias del último endeudamiento junto a la conducta antisocial de quienes especulan con el aumento abusivo de los precios y se aprovechan de la coyuntura bélica para enriquecerse a costa del hambre de los argentinos y las argentinas».

Es en ese contexto que el documento advierte que «el entendimiento con el FMI, ratificado por el Congreso de la Nación y aprobado por el organismo, pone a nuestro país en una continua revisión trimestral por parte de los auditores del fondo».

Eso, se remarca, tiene «consecuencias que conlleva en términos de pérdida de soberanía sobre nuestras políticas económicas, fiscales y cambiarias». Por eso se preguntan «¿quiénes son los que van a pagar esta ´deuda-estafa´ al FMI?».

Y agregan: «¿Lo van hacer el hombre y la mujer de a pie? ¿Los jubilados? ¿Los asalariados que apenas pueden llegar a fin de mes? ¿Los trabajadores de la economía popular? ¿Los comerciantes? ¿Quiénes van a pagar las mieles que disfrutaron un puñado de tránsfugas sinvergüenzas? ¿Quiénes?».

De manera contundente, aclaran que «los trabajadores y las trabajadoras no estamos dispuestos a hacerlo. Ante cualquier ajuste nos convocaremos nuevamente a las calles, reclamando por lo que se comprometieron: salarios y jubilaciones por encima de la inflación, ningún tipo de reforma laboral ni previsional».

También sostienen que «las tarifas de los servicios públicos deben ser razonablemente accesibles para el trabajador», y dicen que quieren «crecimiento económico, reactivación del mercado interno, previsibilidad y estabilidad de precios».

En la lista de deseos también plantean «que nuestros hijos vivan en un país donde se incentive la producción y el trabajo con recibo de sueldo y se combata la especulación financiera, la fuga y el contrabando, que a la luz del sol del Paraná se hace visible en las exportaciones granarias, mineras y en la explotación ictícola de nuestro mar argentino».

Acuerdo con el Fondo: quiénes deben pagarlo

Además, señalan que «estamos convencidos que deben ser los sectores más pudientes de nuestra sociedad (quienes paguen la deuda). Para ello proponemos que la Ley 27.605/21 se prorrogue y sea un aporte solidario extensivo de las grandes fortunas mientras dure el endeudamiento con el FMI«.

Y remarcan: «Que paguen los cien agentes que sabemos que fugaron 24.679 millones de dólares. Que los organismos de control fijen la mirada e investiguen a quienes tienen activos no declarados en el exterior y que paguen los que tienen que pagar».

Por último, aseguran que «el gobierno del Frente de Todos, nuestro Gobierno, llegó para poner fin a las injusticias, para poner en marcha el aparato productivo, para dar trabajo y para construir un Estado de bienestar donde podamos vivir dignamente».

Y concluyen que «no vamos a renunciar a la lucha para exigir acciones concretas y urgentes que, a la vez que garanticen la mejora real de las condiciones de vida de las grandes mayorías, impidan el retorno al poder de quienes nos han hundido en las penurias del neoliberalismo cada vez que accedieron al gobierno. No aceptamos que no haya alternativa, y si no hay, se construye».