Espera el aporte de organizaciones y del peronismo pero prometen 100 mil camioneros. Seguridad, a cargo de Ciudad.
Hugo Antonio Moyano es una persona puntual. Tanto que no le gusta demorar ni el inicio de los actos que organiza o encabeza.
Por eso, el próximo 21 de febrero, poco después de las 15 horas, se llevará a cabo el acto de protesta del gremio camionero, al que la familia Moyano sumó -en su disputa con los jueces que la investigan y con el gobierno de Mauricio Macri- a las organizaciones sociales, a las dos CTA -con el docente Baradel en primer plano- y a sus gremios aliados como Canillitas o Panaderos.
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Por eso, todo lo relativo al armado del acto y sus adherentes, Hugo se lo delega a Pablo, su hijo más combativo, quien trabaja palmo a palmo con los dirigentes camioneros Gabriel "Feúcho" Aparicio, secretario gremial e interior, y al secretario de Organización, Luis Alberto Córdoba.
En esa mesa organizativa hacen número: movilizarán 100 mil camioneros y esperan, en total, la presencia de entre 250 a 300 mil personas.
Moyano con la embajadora del Mundial Rusia 2018, Victoria Lopyreva. Foto Télam
El acto se convoca para las 15 del miércoles 21 en la intersección de las avenidas Belgrano y 9 de Julio de la Ciudad de Buenos Aires. El escenario se montará, de espaldas al Ministerio de Desarrollo Social, que encabeza la ministra macrista Carolina Stanley, y mirando hacia la Estación Constitución.
Habrá, pegado al escenario, un espacio destinado a los principales dirigentes. Y luego, se ubicarán los 100 mil militantes del Sindicato de Choferes de Camiones.
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Aún no se ha definido entre los organizadores el tema de los oradores. Es seguro que cerrará el acto el jefe histórico de los camioneros pero habría, en principio, un orador por cada uno de los sectores que movilizan.
Moyano y Yasky. Foto David Fernandez
Junto al gremio Camionero, estarán las dos CTA (de Hugo Yasky y Pablo Micheli), el denominado Tridente de San Cayetano (Barrios de Pie, la CCC de Juan Carlos Alderete y la CTEP de Juan Grabois), la Corriente Federal (del bancario Palazzo y gremios K como SADOP y los Curtidores del diputado kirchnerista Walter Correa), agrupaciones de jubilados, la APYME, la Confederación General Económica más la Corriente Sindical Combativa, donde sobresale Pollo Sobrero y la Multisectorial contra el Tarifazo, que se reúne habitualmente en el Hotel Bauen.
Pablo Moyano, Sobrero, Yasky y Micheli. Foto David Fernandez
A eso, se sumarán agrupaciones de izquierda, como el PTS de la legisladora porteña troskista Myriam Bregman, quien confirmó que marchará junto al gremio de los Moyano.
Otro punto de interés es que peronistas irán, ya que se han bajado de la movida dirigentes sindicales como Luis Barrionuevo y su ladero Carlos Acuña, los llamados Gordos y los Independientes -el mercantil Armando Cavalieri-, los sanitarios West Ocampo y Héctor Daer, Rodolfo Daer de Alimentación, el estatal Andrés Rodríguez, la UOCRA de Gerardo Martínez, José Luis Lingeri de Obras Sanitarias y Antonio Caló de la UOM, además del peronista porteño del SUTERH, Víctor Santa María.
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Una duda es la participación del PJ bonaerense, que conduce el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez. La presión sobre esa fuerza la ejerce, directamente, Pablo Moyano ya que es uno de sus vices, como se les dice en la jerga peronista bonaerense a los consejeros. En esa organización , en el rubro Consejeros por la Rama Gremial del PJ provincial, están además de Pablo Moyano, Omar Plaini y Francisco Gutiérrez, el dirigente quilmeño de la UOM.
En el peronismo bonaerense se baraja la posibilidad de un documento de apoyo pero sin movilizar.
Los intendentes que adhirieron, hasta ahora son pocos, como el de Avellaneda, Jorge Ferraresi, el de Ensenada, Mario Secco, y el de San Antonio de Areco, Francisco Durañona.
El llamado Tridente de San Cayetano estará en la marcha pero luego de su propia movilización del día 15 “por la emergencia alimentaria y social”; por lo que el aporte de los organizaciones está en veremos y es probable que no lleguen a las 100 mil almas prometidos.
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Sí le pone entusiasmo a la partida el titular de SUTEBA y de la CTA bonaerense, Roberto Baradel. En medio de su disputa con la gobernadora María Eugenia Vidal -a horas de arrancar la paritaria docente bonaerense-, se juntará este jueves con Eduardo López -líder de la CTA porteña- en el gremio Foetra para definir el apoyo y movilización del 21, con eje en las “paritarias sin techo, pago de emergencia a los jubilados, no al aumento de tarifas y por el trabajo y la producción y la restitución de los planes sociales”.
Hugo Moyano junto a Roberto Baradel, cuando se anunció el cambio de fecha de la movilización para el 21 de febrero. Foto Télam
De esa movida se bajó un gremio poderoso, la Unión Docentes Argentinos (UDA), dirigida por Sergio Romero.
Otro detalle aún no definido es el de la Seguridad, aspecto en que los camioneros siempre han sido celosos, más recordando célebres incidentes como en el traslado de los restos de Juan Domingo Perón a un mausoleo en la quinta de San Vicente, terminó con corridas y disparos, donde Emilio "Madonna" Quiroz, entonces chofer de Pablo Moyano, se mostró ante las cámaras de televisión empuñando un arma de fuego y disparando contra los miembros del gremio UOCRA de La Plata, dirigidos por "El Pata" Medina.
La seguridad de la marcha estarán bajo el cuidado de la Policía de la Ciudad y el Ministerio de Seguridad porteño, que conduce Martín Ocampo, donde no admiten que haya alguna previsión diferente a cualquier otra marcha de magnitud.
Entre los organizadores, aparece la especulación sobre la presencia de infiltrados, como los camioneros creen haber visto en las últimas movilizaciones de importancia, como durante la reforma previsional de fines de 2017, frente al Congreso de la Nación o sobre toda la Avenida de Mayo.
Ante la consulta de Clarín a uno de los que está al tanto de la organización del 21F, la respuesta sobre esto fue elocuente: ‘Van a haber 100 mil camioneros: ¿te podés imaginar cómo salen de ahí si se mete algún infiltrado?”, razona el interlocutor.
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